Mestalla se despide de su césped

"No hemos tenido el ritmo que pedía el partido. El campo no estaba uniforme, el tiempo plomizo, la humedad..." comentaba Rubén Baraja este martes al finalizar el partido contra Osasuna que acabó en empate a cero. Días atrás era Míchel, técnico del Girona, el que reconocía que les había costado la circulación de balón... Los técnicos lo saben y los responsables del césped también. Toca darle un cambio y eso es lo que ha empezado a gestionarse esta misma semana aprovechando que el Valencia CF, gracias al calendario y al parón de selecciones, no volverá a jugar en Mestalla hasta el próximo 21 de octubre, contra la UD Las Palmas a las 21 horas.

Técnicamente no es un cambio de césped en Mestalla

Mestalla cambió su césped completamente hace unos meses. Este verano, después de casi una década y en una temporada en la que el Camp de Mestalla ha albergado más de un centenar de eventos -uno de ellos The Champions Burger, que atrajo a más de 350.000 asistentes durante varias semanas sobre el terreno de juego-, el Valencia CF realizó un trabajo de cambio de césped para ponerlo a punto y que luzca en perfectas condiciones para el inicio de la competición oficial. Ya se puso a prueba en el Trofeo Naranja y ha aguantado cuatro partidos. Ahora, por la idiosincrasia del mismo, toca dejar morir el césped de verano para que brote el de invierno y aguantar con él hasta primavera.

¿Cómo funciona el césped del estadio?

El estadio tiene sembrado un sistema de césped híbrido natural y el proceso en verano se resumía en que se 'dejaba morir' la hierba para que se regenerase con fuerza. En estas semanas de cambio, el tapete verde se convertía en amarillo hasta que la variedad estival salía a la luz. Con la Champions Burguer se cambió, pero ahora vuelve a funcionar como antño.

El club utiliza desde hace unos años este sistema -híbrido natural- porque la humedad y el calor que se acumulan en el recinto no facilitan que la modalidad ray grass sobreviva en verano. De ahí, que el club opte por otra variedad tropical que suele cambiar a finales de la primavera y que es con la que solía estar el verano y el comienzo la temporada. Mínimo, aguantaba hasta el parón de selecciones de octubre. Que es ahora y es cuando el club procede a dejarlo morir para que ante Las Palmas haya nacido ya la variedad de invierno.