El Valencia CF confía "sin fisuras" en Rubén Baraja

El Valencia CF está "sin fisuras" con su entrenador Rubén Baraja, después de la dolorosa derrota en Mestalla ante la UD Las Palmas. Ni amago de despido, ni moción de confianza, ni ratificación, ni nada por el estilo. A pesar de la trayectoria del equipo (1 victoria de 17 partidos), la figura de Rubén Baraja no se tambalea. Es más, no hay ni margen, ni plazo, ni nada que, a día de hoy, haga cuestionar la confianza que la directiva (Layhoon Chan, presidenta y Miguel Ángel Corona, director deportivo, sobre todo, y en segundo plano Javier Solís, director corporativo).

Rubén Baraja lo sabe. Es más, no le da ni importancia al asunto. La prueba evidente es que, ya anoche, tras la dolorosa derrota contra la UD Las Palmas, al ser preguntado en una tensa rueda de prensa sobre si futuro o sobre si sentía el apoyo del club, el vallisoletano fue claro, conciso y concreto. "No pienso en eso. Estoy concentrado en el partido, lo que puedo dar y vivirlo hasta el final, levantar a los jugadores. Es mi camino. Lo otro no dependen de mi y no gastó energías ni un segundo".

El técnico está con fuerza

En su comparecencia ante los medios, Baraja hizo un discurso en el que demostró verse con fuerzas para sacar adelante la situación. ¿Su receta? Aplicar lo que ya hizo en el pasado. "Llegué en una situación compleja. Ahora quedan muchos más partidos que cuando llegué y eso siempre te da margen a mejorar y cambiar la dinámica. Entonces llegamos a mitad de temporada y ahora hay tiempo ara revertir la situación, pero hay que entender la situación en la que estamos".

Además su discurso, pidiendo más apoyo y menos crítica ha sido muy cuestionado por la parte de la afición más dispuesta a romper con todo para llevarse de alguna forma a Peter Lim por delante. Baraja, pidió justo lo contrario: unión en torno al equipo. "Lo realmente importante ahora es darnos cuenta de que hay que estar unidos, apoyar al equipo, al club, a la situación que tenemos. Vivir en la crispación nos va a perjudicar a todos. Me niego a creer que nuestra afición no es lo suficientemente inteligente para saber que ahora lo más importante es apoyar al equipo. Eso es entender la situación. Necesitamos que los jugadores sientan su apoyo, como hoy lo hemos sentido por momentos".

La afición, mayoritariamente con Rubén Baraja

Al margen de la decisión de la directiva del Valencia CF, lo cierto es que la afición está mayoritariamente con Baraja y, anoche, cuando salieron los jugadores y el entrenador escoltados por la policía, él fue el que más gritos de ánimo recibió.

"¡Vamos Pipo!", le decían los aficionados. El vallisoletano es leyenda del club y la afición es consciente, en su mayoría, que con las armas que tiene, poco más puede hacer. Eso sí, está lejos su equipo y él mismo del rendimiento de la temporada pasada y, en el deseo de que vuelva a ese punto, radica la confianza del club en él que hoy mismo vuelve a quedar demostrada.