Cole Palmer confiesa su desoladora salida del City: "Ni siquiera iba a ir al Chelsea"

En el Manchester City deben mirar con envidia en el futbolista que se ha convertido Cole Palmer desde que se marchó vendido en verano de 2023 rumbo al Chelsea. El delantero inglés se quedó sin sitio en el equipo de Pep Guardiola y, desde entonces, su crecimiento en Stamford Bridge le ha convertido en una de las estrellas de la Premier League.

Un camino que el propio británico no esperaba que se iba a producir según la historia que contó este jueves en una entrevista para la revista GQ, donde repasó cómo vivió sus últimos días en el club celeste con el dolor de no haberse podido quedar donde se formó desde que era pequeño.

Desde 2018 había ido escalando en las categorías inferiores, pero los fichajes estrellas en un equipo con estrellas como Erling Haaland, Bernardo Silva, Phil Foden y compañía agotó sus opciones de jugar.

"Sabía que no iba a jugar tanto como quería. Incluso cuando iba a los campamentos de Inglaterra con grupos de menores, había jugadores que jugaban en la liga todas las semanas. Y mirabas a tu alrededor y pensabas: ‘Puedo jugar en la liga’", destacó.

Sin embargo, su deseo de quedarse en el City seguía siendo su idea después de que aquel verano Riyad Mahrez: "Ni siquiera iba a ir al Chelsea. Me convencieron. No, ¿sabes qué? Solo quería ir cedido".

El último día de Cole Palmer en el City de Guardiola

El inglés no vivió unos últimos días fáciles en Manchester. Pep Guardiola le había comunicado en la recta final del mercado que lo mejor para las dos partes era buscar un traspaso y se marchó en el último día de la ventana a cambio de 40 millones de euros.

"Recuerdo que entrenaba un miércoles por la tarde en el City y la noticia era 'están intentando llegar a un acuerdo'. Cada vez que salía la pelota, le preguntaba al utilero o al médico si ya habían acordado el precio. Pero el acuerdo se alargó, como suelen hacer los acuerdos, y la mayoría de la gente se fue a casa. Así que no tuve la oportunidad de ver a mucha gente y decirles que me iba. Solo tenía que recoger mis cosas"

"Esa es la dura realidad del fútbol de alto nivel: no hay despedidas, salvo las que se pueden decir por mensaje de texto. Envié un mensaje al chat grupal, dije 'Gracias y todo. Me voy'. Eso fue todo", concluyó.

En su primera temporada como 'blue' marcó 27 goles y 15 asistencias en 48 partidos y en la actual lleva ya siete dianas y cinco pases de gol en 13 duelos. Todo un despliegue goleador que le ha convertido en la estrella del Chelsea, equipo donde encontró la felicidad de jugar y demostrar todo lo que nunca pudo hacer con Guardiola.