Gianluigi Buffon confiesa por qué rechazó al FC Barcelona: “Fue una señal”

Gianluigi Buffon no ha cerrado del todo su relación con el fútbol. Tras colgar las botas (o los guantes, en su caso), el guardameta trabaja ahora como ayudante de la selección italiana, donde fue tan laureado. Ha concedido una entrevista al diario Corriere della Sera, en la que ha repasado su increíble trayectoria futbolística, sus mejores rivales y los recuerdos más emotivos. Todas estas memorias están presentes en su nuevo libro: ‘Caer, levantarse, caer, levantarse’. También ha hecho referencia a su 'no' al FC Barcelona, que vino decidido por "una señal".

Gianluigi Buffon confiesa por qué rechazó al FC Barcelona

Entre todas las cuestiones por las que ha sido preguntado, Buffon se ha mostrado sincero sobre por qué rechazó al FC Barcelona en 2023, cuando su contrato con la Juventus de Turín terminó: "Tuve una oferta del Barcelona para ser su segundo portero. Me gustaba la idea de jugar con Messi, después de haber jugado con Cristiano. Sin embargo, un día estaba conduciendo y en la radio pusieron una canción de Jovanotti que me gustaba mucho y que hacía diez años que no escuchaba: 'Bella'. Miré hacia arriba y vi el cartel de Parma en la carretera. Fue una señal. Y así cerré mi carrera, donde empezó todo”, confesaba.

Además de hacer referencia al club blaugrana hablando de su fichaje no completado, también se decantó por el lado más culé cuando le preguntaron sobre quién había sido el mejor rival al que se había enfrentado: “Jugué con tres generaciones, ¿cómo elijo? Zidane, Ronaldo, Messi, Cristiano, Iniesta...", aunque cuando el periodista insistió, Buffon se mojó: “Neymar. Para el jugador y el chico que es, debería haber ganado cinco Balones de Oro". 

Su lado más personal

El mítico portero italiano ha repasado algunos episodios más personales, como por ejemplo su percepción sobre el oficio de portero: Ser portero: "Hay algo masoquista en el portero. Los campos de mi juventud eran los mismos que en los años 70: el terreno era duro como el cemento. A los porteros tradicionales se les reconoce por sus manos destrozadas, por sus caderas doloridas, por las muchas veces que se han caído hasta sangrar", explicaba.

También ha profundizado sobre la depresión que sufrió cuando tan solo tenía 26 años, algo que comenzó con un ataque de pánico durante un partido: "Sentí presión en el pecho, no podía respirar, pensé que nunca querría estar allí y que nunca podría jugar el partido. Me dije: ‘Gigi, si no sales al campo, creas un precedente contigo mismo. Quizás te pase una segunda vez y luego otra vez. Y ya no podrás jugar’. Entonces entré al campo. Inmediatamente hice una buena parada que salvó el resultado, porque luego ganamos 1-0. Pero el problema persistió. El médico hizo el diagnóstico, que luego fue confirmado: era depresión", comenzaba relatando.

"Rechacé la medicación. La necesitaba, pero tenía miedo de volverme dependiente de ella. Sólo fui al médico tres o cuatro veces, pero me dio un consejo valioso: ‘busca otros intereses, no te centres exclusivamente en el fútbol’. Y fue ahí cuando descubrí la pintura", confesaba.