Fernando Vázquez se resigna: su solución es "dar la temporada por perdida"
De entre los problemas que preocupan en estos momentos a la población española, uno de los menos relevantes es el de la solución para la competición liguera en caso de que no pueda reanudarse. Muchas son las fórmulas propuestas, entre ellas, la elegida por el entrenador del RC Deportivo, Fernando Vázquez.
El técnico de Castrofeito, conocido por no tener pelos en la lengua y decir siempre lo que piensa, apostó recientemente en unas declaraciones por "suspender la competición y empezar en agosto de cero. Sería un año perdido a nivel competitivo. Para mí lo más normal. Sin ascensos ni descensos ni nada porque no se consiguieron en el terreno de juego. Hay mucha gente que se podría sentir perjudicada. Alguna gente podría salir favorecida pero evidentemente yo creo que sería lo más real porque la competición no se acabó y las reglas que valían no se pueden cumplir, entonces un acuerdo a nivel de todos. Si la situación sigue así de negativa y la competición no se puede seguir disputando evidentemente tendría que ser anulada desde mi forma de pensar".
Una resolución que, desde luego, no estaría exenta de polémica, pues dejaría en papel mojado las 31 jornadas que se han disputado en LaLiga SmartBank, lo que supone la disputa de más de dos tercios de competición. Medida que en este caso podría beneficiar, entre otros, a su equipo, el Dépor, que se encuentra en estos momentos en posiciones de descenso, aunque Fernando Vázquez lo justificaba: "En estos momentos el Deportivo no está en descenso tal y como está la clasificación sino que sería el Albacete, sería injusto para ellos. El Deportivo está en situación incluso de llegar al play off si nos ponemos exigentes. No hay nada determinado, alguien tendría que llegar a un acuerdo para aceptar esta situación sin acabar en los tribunales".
Sólo el tiempo dirá cuál es la solución definitiva para una situación que se ha ido complicando con el paso de las horas y que bien podría acabar con una resolución que difícilmente pueda contentar a todo el mundo.