Oviedo, por encima de Gijón, pero no para bien: así queda el derbi de la contaminación
La contaminación atmosférica por NO2 (dióxido de nitrógeno) se ha reducido un 58% en Gijón y un 41% en Oviedo en el periodo comprendido entre el 14 de marzo, fecha en la que se decretó el estado de alarma debido a la crisis el coronavirus, y pasado el 30 de abril. Así, la ciudad de El Molinón se lleva este particular derbi ante la del Carlos Tartiere.
Son datos revelados por un informe publicado este lunes, 4 de mayo, por Ecologistas en Acción, el cual ha constatado una mejora "sin precedentes" de la calidad del aire en las principales ciudades españolas, que cifra en una media, precisamente, del 58 por ciento.
Según Ecologistas en Acción, "la reducción drástica del tráfico se sigue traduciendo en una mejora sin precedentes de la calidad del aire en las ciudades españolas, muy por debajo de los límites legales y las recomendaciones de la OMS".
El informe también refleja una menor reducción de la contaminación en las ciudades de la cornisa cantábrica "debida quizá a factores meteorológicos", mientras que las ciudades del litoral mediterráneo son las que más han rebajado los niveles de NO2.
Para la desescalada, la organización ecologista propone mantener "buenas prácticas" como la compra de proximidad, el teletrabajo voluntario y la administración electrónica, rebajar el límite de velocidad en vías urbanas a 30 kilómetros por hora, potenciar la movilidad peatonal y ciclista y garantizar el transporte público "con una ley de financiación".
Los datos en el Principado
Por municipios, la reducción ha sido del 32% en Oviedo; del 49% en Gijón; un 16% en Avilés y un 35% en las cuencas mineras. Datos que distan mucho del 72 por ciento en Valencia según los resultados de un estudio para el que se han analizado los datos de 129 estaciones de medición en las principales ciudades españolas, informa EFE.
La reducción de la actividad económica y del tráfico durante el estado de alarma ha favorecido que la contaminación del aire se haya reducido un 35% de media en el Principado, según los datos recogidos por las estaciones medidoras del Gobierno asturiano. Esto refleja "una rebaja muy significativa" de los niveles de partículas PM10 y PM2,5 y niveles de ozono "inusualmente bajos para el inicio de la primavera, tanto en las zonas urbanas como en las rurales.
