Dos detenidos y dos imputados del Sporting por agredir con bates de béisbol a oviedistas en el derbi
La Policía Nacional ha detenido a dos personas e imputado a otras dos, todas ellas vinculadas a una peña ultra del Sporting de Gijón. Se les acusa de agredir con bates de béisbol y defensas extensibles a varios aficionados del Real Oviedo la víspera del derbi del pasado mes de abril. A todos ellos se les imputan los delitos de odio, lesiones y amenazas, según ha informado este jueves la Jefatura Superior de Asturias.
Los agentes habían desplegado un dispositivo especial con motivo del derbi entre el Sporting de Gijón y el Real Oviedo en El Molinón del pasado 16 de abril. Estos detectaron la víspera del partido dos incidentes violentos en Oviedo: uno, en el parque de San Francisco; y otro, en la calle Campomanes.
Según fuentes policiales, un grupo de unos diez jóvenes embozados y armados con bates de béisbol y defensas extensibles agredieron a otro grupo que transitaba por el parque de San Francisco, causando lesiones a uno de ellos.
Los agredidos, que eran aficionados del Real Oviedo, lograron repeler el ataque. Además, consiguieron retener a uno de los agresores hasta la llegada de los agentes. Mientras, el resto emprendieron la huida.
Unos minutos después, en la calle Campomanes, se produjo el segundo incidente. Y es que cinco personas pertrechadas con pasamontañas bajaron de un vehículo y amenazaron con barras de hierro y bates a un viandante al que le preguntaron si era seguidor del Real Oviedo. Al contestar éste negativamente, huyeron a bordo del mismo vehículo.
Los agresores del derbi, identificados como ultras del Sporting
Agentes de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana identificaron a tres personas relacionadas con estos hechos. Mientras, la investigación apuntaba a la posibilidad de que la motivación de la agresión tuviera que ver con la animadversión entre aficiones rivales.
La intervención de la Brigada de Información de Oviedo logró confirmar que varios jóvenes, vinculados con un sector radical de animación del Sporting, se habían desplazado en vehículos particulares desde Gijón la noche previa al encuentro de fútbol. Y que, de hecho, lo hicieron con el objeto de “localizar y agredir a aficionados oviedistas”. Esto fue lo que permitió su identificación.