Un Oviedo sin ideas en ataque salva un punto en el Anxo Carro
No pudo enderezar su rumbo el Real Oviedo en su visita al CD Lugo (0-0) en el Anxo Carro. Tras perder ante el Ibiza y sumar tres partidos sin ganar, los de Bolo querían romper con esas dudas obteniendo un triunfo. Pero no pudo ser. Los carbayones, que comenzaron con fuerza, se desinflaron y acabaron conformándose con un nuevo empate.
Salió con fuerza el Real Oviedo y, cuando aún no se había cumplido el primer minuto de juego, Borja Bastón disparó a puerta encontrándose con Whalley.
Con un Bretones incisivo atacando por la izquierda, el Oviedo mostraba sus credenciales y su clara intención de ir a por el triunfo. Muy poco se prodigaba en el área carbayona el equipo de Hernán Pérez hasta que pasados los primeros 20 minutos dio un paso adelante.
La más clara llegó casi a la media hora de juego. Un mal despeje de Xavi Torres lo aprovechó Enrich para rematar como pudo -con una semi volea- para que el balón se marchara cerca del poste de la portería gallega.
Ese paso adelante del Lugo se notó con el paso de los minutos y Sebas Moyano estuvo a punto de adelantar al conjunto de Hernán Pérez. Un remate suyo tocó en la defensa del Oviedo y se fue muy cerca del palo de Tomeu Nadal.
Con un Oviedo venido a menos y con un Lugo que estaba creciendo sobre el verde llegó el descanso en el Anxo Carro.
Sin cambios por parte de ninguno de los dos equipos, la segunda parte comenzó como la primera: con un aviso del Real Oviedo. A los pocos instantes, Koba se sacó un disparo con pierna izquierda que obligó a Whalley a estirarse para despejar el balón.
Bolo reaccionó con un doble cambio en el 59' dando entrada a Viti Rozada y Hugo Rama por Pomares y Koba. Éste último se marchó con visibles molestias.
Lejos de mejorar, el equipo de Bolo se vino todavía más abajo a la par que crecía el Lugo. En el 67', un remate de Juanpe obligó a Tomeu Nadal a emplearse bajo palos para repeler esta ocasión. Se notaba que el Oviedo había desaparecido del centro del campo desde la salida de Koba.
Ante esta situación, Bolo decidió dar entrada a Javi Mier y a Miguelón en lugar de Lucas y Enrich.
Tomeu Nadal salvó al Oviedo a falta de un cuarto de hora para el final evitando que el testarazo de Juanpe acabara dentro de su portería.
Sin tiempo para más, el cuadro carbayón firmó un nuevo empate y suma ya cuatro partidos sin conocer el triunfo.
En el Ancho Carro se vio a un Estrecho Oviedo. Bolo no da bola y los jugadores no saben a qué juegan. Los mexicanos acabarán largandose si no son titulares, si bien, el que tiene todas las papeletas para hacer la maleta es el entrenador. Aún estamos a tiempo porque el equipo tiene calidad pero no tienen claro que deben hacer en el campo.