Lenglet, un nuevo valor emergente del 'puente aéreo' Sevilla-Barça
Clément Lenglet, uno de los últimos descubrimientos con el sello de Ramón Rodríguez 'Monchi', ahora director deportivo del Roma, en su vasta etapa en el Sevilla, es el nuevo valor emergente que cruza el 'puente aéreo' entre la capital andaluza y Barcelona, en este caso previo pago de 35,9 millones de euros.
El francés se marcha a un 'grande entre los grandes', a un Barça obligado a luchar por todos los títulos, ya consagrado como un defensa de élite, pero con mucho margen de progresión todavía, pese a los intentos vanos del Sevilla por convencerle para que ampliase su contrato y se asegurara, como gran pilar de la zaga sevillista, seguir jugando muchos minutos y creciendo aún más antes de dar ese gran salto.
El nuevo refuerzo azulgrana, de 23 años, no es un futbolista ni un central al uso, pues a su contrastada calidad técnica, sobre todo para la salida del balón desde atrás, su rapidez y su seguridad en defensa se le unen, sobre todo, su personalidad y que es un chico muy centrado, con la cabeza muy bien 'amueblada' y un gran profesional.
El jugador de Beauvais ha demostrado su madurez desde su llegada con sólo 21 años al Sevilla, en enero de 2017 desde el Nancy de su país y después de casi cuatro años de seguimiento por parte de Monchi y su equipo, y lo ha ratificado ante todas las vicisitudes y la demora con las que se ha cerrado su fichaje.
Lenglet, internacional en todas las categorías inferiores de Francia hasta la sub-21 y al que sólo le falta debutar con la absoluta, una realidad que se veía muy cercana por su gran rendimiento en el Sevilla, ha hecho honor a su fama de tipo tranquilo, equilibrado y paciente, que no se altera por las circunstancias, en la concentración sevillista de pretemporada en Benidorm.
El estoicismo, el buen ánimo y la entrega con los que ha afrontado estos días, sabiendo que su futuro estaba en Barcelona, han sido un ejemplo más de su sentido común y profesionalidad, hasta el punto de que sus antiguos compañeros y el técnico Pablo Machín lo despidieron el miércoles con una ovación y todos los honores.
El francés, admirador de su compatriota Zinedine Zidane, también dio muestras de ser un futbolista diferente, de su implicación y compromiso, cuando en enero de 2017 fue presentado como sevillista y, a pesar de que sólo llevaba tres días en la capital hispalense, ya respondió en español a las preguntas de los periodistas.
Lenglet sigue la estela de otras figuras del Sevilla que hicieron escala en el Ramón Sánchez Pizjuán antes de pasar al Camp Nou. Es el sexto sevillista que se marcha al Barcelona en el último decenio, como ya hicieron el brasileño Dani Alves y el maliense Seydou Keita en 2008, el brasileño Adriano Correia en 2010, el croata Iván Rakitic en 2014 y Aleix Vidal en 2016, que dejaron casi 120 millones de euros en las arcas del club andaluz.
Fichado por el Sevilla por unos cinco millones de euros, comenzó su carrera en el Nancy, con el que jugó 83 partidos y marcó dos goles en la Primera y la Segunda división francesa, y tras cumplir su sueño de recalar en un club de nivel de España ha disputado 73 encuentros con la camiseta blanquirroja del club de Nervión.
El zaguero zurdo se convirtió en indiscutible en su temporada y media en el Sevilla con todos los técnicos: en la 2016-17 con Jorge Sampaoli y en la última con Eduardo Berizzo, Vincenzo Montella y Joaquín Caparrós, actual director de fútbol del club que se negó a negociar su traspaso, de ahí que el Barça haya tenido que pagar su cláusula.
En total, ha disputado como sevillista 73 encuentros, 19 en su primera media campaña y 54 en la pasada -fue el que más minutos y partidos jugó de la plantilla- con cuatro goles marcados, y del total de ellos 52 fueron de Liga, 12 de la Liga de Campeones y 9 de la Copa del Rey.