Una plantilla de 18 jugadores, un calendario apretado y la vuelta de Luis Suárez
Con una plantilla corta y la consistencia como principal incógnita, el FC Barcelona, líder de LaLiga Santander, defiende un margen de dos puntos sobre el Real Madrid, su más inmediato perseguidor, en las once finales que le quedan para sumar el tercer título doméstico consecutivo, algo que no consigue desde el trienio 2009-2011.
El técnico Quique Setién, que en enero relevó a Ernesto Valverde en el banquillo azulgrana, tiene ante sí la oportunidad de sumar su primer título oficial como entrenador dirigiendo a un equipo que, pese al liderato, generaba muchas dudas antes del parón por el coronavirus.
Una plantilla corta y muy veterana
La pandemia interrumpió bruscamente la competición y, en algo más de un mes, el Barça afrontará un calendario exigente para una plantilla corta cuyas primeras espadas superan los 30 años. Es el caso de Lionel Messi, Gerard Piqué, Sergio Busquets y Jordi Alba, fijos en los planes de Setién, así como Ivan Rakitic y Arturo Vidal, que deberán afrontar partidos cada tres o cuatro días.
A ellos se sumará el más que probable retorno de Luis Suárez (33 años), que ha aprovechado el parón para recuperarse de la intervención quirúrgica del menisco de la rodilla derecha a la que se sometió en enero.
El gol es para Quique Setién una de las asignaturas pendientes desde de su llegada. Bajo sus órdenes, el Barcelona ha disputado ocho partidos ligueros, con un balance de seis victorias y dos derrotas, ante el Valencia y el Real Madrid, dos tropiezos en los que el equipo azulgrana se quedó sin marcar, algo insólito en los últimos años.
El regreso de Suárez dará aire a una plantilla corta, con pocos efectivos después de los movimientos realizados en el pasado mercado de invierno.
Sin contar los jugadores del filial ni el lesionado Ousmane Dembélé, sin licencia federativa para jugar LaLiga Santander, el Barça cuenta con 18 fichas del primer equipo para afrontar un calendario diabólico.
El calendario que le resta al Barcelona
Disputará cinco partidos en el Camp Nou y seis como visitante. Los duelos más exigentes para los azulgrana (Athletic, Atlético y Espanyol) serán en casa, donde han demostrado ser más sólidos esta temporada (40 puntos de 42 posibles), cediendo un único empate.
Lejos de Barcelona, las visitas a Sevilla y Villarreal se presentan, previsiblemente, como las más duras, todo ello sin olvidar los encuentros ante el Celta, el Mallorca y el Valladolid, tres rivales que se jugarán la permanencia.
Once finales con la consistencia física como principal duda. Desde el regreso a los entrenamientos, tres jugadores han sufrido contratiempos físicos: Samuel Umtiti, con problemas en el sóleo, Ansu Fati, que no se entrena debido a molestias en la rodilla, y Lionel Messi, aquejado de una contractura en el cuádriceps.
El caso del argentino, máximo goleador azulgrana hasta el parón (19 goles en la liga), no preocupa, por el momento, al cuerpo técnico, que espera que esté a punto con vistas al encuentro contra el Mallorca.
No obstante, las molestias del referente ofensivo del equipo son un contratiempo más para Setién, que deberá exprimir no solo a los jugadores del primer equipo sino también a refuerzos del filial como Riqui Puig, Álex Collado y Ramón Rodríguez 'Monchu' para alargar la hegemonía del Barça, que suma ocho de los once últimos títulos domésticos.