Un Espanyol sin ritmo se lleva un punto de El Sadar
Osasuna y RCD Espanyol firmaron este sábado las tablas (0-0) en su debut liguero en un partido entretenido que significó la vuelta de la hinchada rojilla a las gradas de El Sadar 524 días después.
El Sadar volvió a acoger público en sus gradas 524 días después y lo hizo con una espectacular puesta en escena delante de los más de 7.700 rojillos que se dieron cita en el reformado estadio y que disfrutaron viendo a su equipo de nuevo en directo.
Osasuna salió en tromba buscando la meta defendida por Diego López. En el minuto 4 llegó la primera ocasión clara. Nacho Vidal puso un buen centro desde el costado derecho que Kike García no supo aprovechar. El delantero, que ocupó la banda izquierda durante gran parte del choque, no pudo dirigir su testarazo hacia portería.
Rubén García y Kike Barja fueron los hombres encargados de crear peligro con sus constantes internadas por las bandas antes de lanzar centros que los rematadores no lograron conectar.
Por su parte, los pericos buscaron continuamente la espalda a una zaga rojilla muy segura que dejó una buena imagen durante la primera mitad. Embarba pudo adelantar a su equipo en un mano a mano con Sergio Herrera, pero el guardameta rojillo desbarató la ocasión con una gran parada.
El serbio Darko Brasanac puso la calma en el centro del campo acompañando a Moncayola y a un Lucas Torró algo desacertado en el pase. La afición navarra no paró de animar a los de Jagoba Arrasate en ningún momento.
Tras el descanso, Osasuna siguió buscando la portería contraria ante un Espanyol que también tuvo sus opciones para adelantarse. Arrasate no lo vio claro y mando a Kike García a la punta de ataque para ganar balones por alto, algo que el conquense ejecuta a la perfección.
Un moment que mai oblidarà!
Debut a Primera! Moltes felicitats!
Orgull de planter!#RCDE | #OsasunaEspanyol pic.twitter.com/BEGeP0Rz60— RCD Espanyol de Barcelona (@RCDEspanyol) August 14, 2021
El Sadar recibió con una sonora ovación al argentino Chimy Ávila. El delantero salió para revolucionar un partido que dominaba su equipo sin lograr materializar sus oportunidades.
Cada vez que RDT entraba en contacto con el balón la defensa rojilla activaba las alarmas. El partido llegaba a su fin y Osasuna no podía derribar la meta espanyolista.
Finalmente, Osasuna no pudo brindar a su afición una victoria en el primer partido de Liga, algo que intentarán buscar la próxima jornada ante el Celta también en Pamplona.