A las buenas olas hay que subirse, no esperar
Ibon Landa, D. Com. F. Vizcaína de Baloncesto
Si vives en una casa en la que el deporte no es importante y no te lo inculcan como en otras, quizás es más complicado tener un buen bagaje. Aunque comencé a jugar a baloncesto con diez años y a mis casi 31 –dependerá del día que salga este artículo publicado- no he parado de ver esferas naranjas por mi vida, hasta los ‘veintimuchos’ no me importaba más que el partido del sábado y la NBA. Me imagino que eran dos las razones fundamentales.. una que yo tampoco he sido ‘forofo’ de nada, y la segunda, que tampoco había nada en los alrededores que motivara a los seguidores del baloncesto.
Siempre he admirado, escuchado y seguido a los que considero unos ‘cracks’ de esta historia. Roberto Calvo, periodista del diario DEIA, Joxean Figueroa y Pedro Zorrozúa o Igor Minteguia e Isaác Amézaga… por ejemplo. Son gente que me alimentan de ese vacío que tengo de nuestro baloncesto y que tanto me hubiera gustado conocer. Me imagino, que con los años yo me convertiré en uno de ellos y daré la ‘tabarra’ a algún joven con las historias de Quintana, Madina, Hamilton, Recker, Mumbrú o Grimau (cuando las empiece a escribir por el Bilbao Basket).
Dicen los surferos que la ola buena no se espera, se coge. Y el baloncesto en Bizkaia es una gran masa que está pasando ante nuestros ojos para que todo aquel que quiera subirse no espere. El Bizkaia Bilbao Basket va a jugar la Euroliga… señores y señoras… ¡la Euroliga!, por primera vez en nuestra historia tres equipos femeninos bizkainos estarán en Liga Femenina 2 y, espero porque lo necesitamos, el Santurtzi saldrá del túnel en el que se ha metido o le han metido.
Inmerso en el Campeonato de Europa U20, están dejando literalmente ‘la vida’ en él muchas personas que aman en Bizkaia este deporte. Gente de clubes de la tierra que apuestan por estos eventos. En unos años, 2014, tendremos un Mundial en Bilbao. Quizás esa sea la cresta de la ola en la historia del baloncesto en Bizkaia, puede que la sea un equipo unificado femenino en la primera liga estatal, puede que sea un título del Bilbao Basket o puede que sea ver a varios chavales escalando categorías hasta convertirse en jugadores profesionales y acompañar, por fin, al solitario Javi Salgado.
Lo único que está claro, es que una vez te subes en la ola, lo único que puedes hacer es… disfrutar.