La Directiva del Athletic optaría por alargar la cubierta de San Mamés

Uno de los asuntos más esperados en la Asamblea General Ordinaria del Athletic Club de 2015 era el espinoso caso de los socios que se mojan los días de lluvia en el nuevo campo de San Mamés. La principal opción, "a día de hoy ya que hay estudios en marcha", seria alargar la cubierta, con un coste de 10 millones, algo que no impediría que "algunos se mojen" y que en todo caso será comunicado definitivamente en noviembre o diciembre a los socios.

Los afectados por la lluvia, varios miles, se quejan de que cuando adquirieron su nueva localidad se les aseguró que no se iban a mojar y piden soluciones a la Junta Directiva de Josu Urrutia. Entre ellas, que se cubra el campo o que se les rebaje el precio del abono, si bien entienden, en palabras de Javier Fernández Matxin a Onda Vasca, que "aunque el aficionado pague 100 euros tiene derecho a no mojarse", y que "la Junta tendrá que tomar la mejor medida, decisiones difíciles. Queremos que se ponga una fecha a las obras que se vayan a realizar".
Explicaciones de la Junta
En su alocución a la asamblea de compromisarios el secretario de la Junta, Javier Aldazabal, ha señalado que "San Mamés es abierto y entra agua, está cubierto hasta la primera fila y es razonable que por efecto del viento algunos socios se pueden mojar. San Mamés es de los mejores estadios del mundo, pero tenemos un problema. Moja a más gente de lo que esperabamos todos y es descabellado pensar que no nos preocupa", comentaba a los compromisarios. "Nos hemos pasado muchos meses recabando datos", avanzaba contestando a las críticas por el silencio de la Junta.
"¿Qué hacemos? ¿Por qué hoy lo contamos? Porque en 2013 fuimos al campo aún sin acabar y conocímos el problema. Nos pusímos en contacto para ser asesorados por IDOM ya en noviembre de 2013. En la 2014/15 se ve el fenómeno con todo el perjuicio que hoy se conoce y con el que estamos sensibilizados. Ahora tenemos datos con el estadio cerrado", ha comentado, "por eso es el momento adecuado de tomar una decisión".
"En junio de 2015 los técnicos plantean alternativas", señala, "y llevamos a Arup los datos para pedir una tercera opinión". Con todo ello llegan las posibles opciones a un "asunto muy complicado debido a las diferencias que hay en los días de lluvia, grosor de la gota, dirección del viento, etc...".
El 'azote' nor-noreste
Y es que el tema se las trae y la explicación es de lo más prolija. "Los partidos ante Málaga y Torino son los que más gente se ha mojado", admitía Aldazabal, quien aseguraba haber "cotejado datos con agencias como Euskalmet, colocado anemómetros 3D, contratado a BMT para predecir el viento, visitado estadios de la Bundesliga y la Premier, e identificado el número de sillas que se mojan en función de muchas variables. Podemos decir que el viento nor-noreste es el que más perjudica a San Mamés", según desvelaba.
Seis soluciones posibles
Las opciones pasan por cerrar el campo con cierres rígidos o de lona, por lo visto en Europa, pero "lamentablemente cada estadio se comporta de forma tan distinta como las personas, lo que impide ir a una solución parecida a otras y copiarlas, hay que buscar algo nuestro", resumía. Hay seis alternativas analizadas cada una con varios criterios a cumplir de comodidad, coste, construcción, etc...
Flaps: alerones que desvian el viento hacia arriba. No merece la pena.
Malla semipermeable: una especie de 'colador'. 11 'kilos' de coste. Daría pegas.
Arco de cobertura: como el del antiguo San Mamés. Descartado.
Ampliación de la cubierta: mejora notable, pero eficiencia no absoluta. Hasta 16 metros con cables. Coste 10 millones. Problema: el césped
Cerrar totalmente el campo: rígida o lona. Plazo complicado de la obra: 1 año en Anoeta, o 3-4 temporadas a tramos. Coste: 50 millones. Descartado por los técnicos.
Alargamiento cubierta, mallas, faldón descolgado: descartadas.
Solución más lógica
"Queremos las soluciones de un campo cubierto entero, pero no se puede, por lo que vamos más a algo intermedio como es la extensión de la cubierta", dijo Aldazabal antes de dar paso a un video argumentativo. "Se puede hacer en verano, por 10 millones de euros, pero ojo, no quiere decir que nunca se mojaría alguien, la eficiencia no es absoluta y daría problemas al césped por el tema del sol y agua", explicaba sobre la posibilidad que hoy primaría.
Hay otra alternativa en Qatar "para que no les entre aire caliente con una doble cubierta o un doble techo más bajo del actual, está en estudio pero ha dado buenos resultados en el ordenador. Las dificultades técnicas son altas y no fáciles de solucionar en la visión por ejemplo, hay que ver como pasa el túnel de viento, en resumen tiene muchas incertidumbres", señalaba, "pero aún esperamos datos".
Fecha de resolución
La alternativa elegida será comunicada "en noviembre o diciembre en una presentación que se comunicará oportunamente, antes de fin de año, tras validar todas las opciones presentadas", avisaba.