Vendidas ya 37.000 entradas para las finales de San Mamés

El próximo año mayo Bilbao se convertirá en la capital mundial del rugby. San Mamés acogerá los días 11 y 12 de mayo San Mamés acogerá dos de los principales acontecimientos del deporte del balón oval, las finales de la European Champions Cup y Challenge Cup. Restan todavía ocho meses pero el ritmo de enta de entradas sigue siendo vertiginoso.

Las localidades están a la venta a través de la plataforma online de venta de entradas de la European Professional Club Rugby (http://www.epcrugby.com/) y a día de hoy han sido adquiridas ya 37.000, 26.000 de ellas de la Champions, de las 100.000 que se van a vender para los dos partidos, según ha anunciado Vincent Gaillard, Director General del EPC.
Se podrán adquirir a través de la página web de la European Professional Club Rugby. Además, la organización atenderá consultas y ofrecerá información en euskera, castellano, inglés y francés, a través de la dirección de correo electrónico info@rugby2018.bilbao.eus
 

El precio de las entradas está agrupado en cinco categorías según la ubicación de las localidades, y oscila entre los 20 euros la más barata y los 55 euros la más cara para acudir a la Challenge Cup que se disputará el viernes, 11 de mayo, y entre los 40 euros la más barata y los 95 euros la más cara para vivir en directo la Champions Cup que tendrá lugar al día siguiente, sábado 12 de mayo.  La celebración de estas finales, consideradas las competiciones anuales europeas más importantes de clubes profesionales de rugby, supondrá para Bilbao, Bizkaia y toda Euskadi un importante impacto económico, de imagen y proyección internacional. La cita de Bilbao está considerada como uno de los eventos más destacados que vamos a tener en Euskadi en 2018 con el que se prevé la llegada a Bizkaia de miles de turistas y personas aficionadas de todos los países.

 Destacar, entre otros datos, los 86.000 aficionados -58.000 en la final Champions- que asistieron en mayo de 2016 en Lyon a estas dos finales con un impacto económico en la ciudad francesa de 20,4 millones de euros, a lo que hay que añadir que el encuentro final fue televisado para toda Europa.