La victoria más cómoda del Athletic

Tras el parón navideño parece que en el entorno sólo se habla de Kepa Arrizabalaga, pero lo cierto es que el Athletic Club se citaba este domingo en San Mamés con el Deportivo Alavés con idea de mostrar sus progresos en el nuevo año. Los rojiblancos, con seis jornadas sin perder y tan solo cinco tantos anotados en Liga en casa, hacían frente al resurgido conjunto babazorro derrotándole por (2-0) con goles de Etxeita y Aduriz, este de penalti.

Descansado y sin copa en enero, -"lo que sucede conviene" que dice el Cuco-, el conjunto vizcaíno fue muy superior físicamente, sin lucir tampoco, pero acumuló todas las ocasiones de gol y el resultado fue muy corto en la vuelta de Beñat, ya que no se pudo ver la de Yeray. Un triunfo que unir al del Villamarín, que trae paz y sosiego, ilusión incluso antes de cerrar la primera vuelta, tan solo ensombrecido por la lesión muscular de Oscar de Marcos.
Ziganda, siendo Bóveda y Vesga los descartados, dio paso a Etxeita por el sancionado Núñez con Yeray en la banqueta, retornando De Marcos al lateral derecho y Williams a su plaza en banda. La idea era llevar el peso ante un rival que te conoce bien y que incluso optó por cambiar de campos para resultar incómodo desde el inicio.
Lo intentó con su pressing, pero no pudo detener el empuje inicial de un muy buen Athletic que hizo media hora sobresaliente. Pacheco tuvo que echar a córner un botepronto de Williams, y para el 7' ya perdían los vitorianos con gol de Etxeita, que se estrenaba en liga haciendo bueno, por fin, un córner tras 94 intentos.

Casi llega el segundo tras un carrerón de Williams, una bolea de Aduriz o con un remate de cabeza de Raúl García,... sin duda hoy había chispa, vitaminada por la dupla Rico-Iturraspe, que seguramente sea la favorita para el Cuco. Desde luego dan otro marchamo. Ritmo que no pudo seguir Burgui, lesionado muscularmente para dejar paso a Bojan, o sus dos compañeros tempranamente amonestados ante unos leones en versión de altos kilates.
Quitando una falta de Ibai y una salida de Iago, escorada, ante Pedraza los visitantes dieron muy poquito que hablar en el primer periodo, tan solo su meta, Pachecho, se lució en una primera parte en la que casi se lleva un gol olímpico de Susaeta que acabó en el larguero. Fue muy aplaudido ese tiro pero no tanto, lógicamente, como el momento en el que Yeray saltó a calentar, la Catedral -en pie- echaba humo en honor al de Barakaldo que aguantó el tipo como pudo en la banda con su peto.

Lamentado tan solo ir 1-0 después de haber tenido varias ocasiones y un 62% de posesión, en los segundos 45 minutos tocaba rematar la faena. Un resultado corto nunca es síntoma de tranquilidad, a la que no ayudaban los centros de Iñaki que siempre morían en manos del portero. A Aduriz, en corto, sí le puso uno magnífico, pero Pacheco salvó en su salida, pero se vio impotente para atajar el ¿penalti? de Duarte a Rulo que Aduriz anotaba en su séptimo gol en esta liga.
Con la felicidad extendida por el graderío el momento sombrío fue un tremendo choque entre Saborit y Laporte que dejaba KO al lateral catalán. Afortunadamente pudo recuperarse (recuerden que Balenziaga está lesionado), para ver in situ la que erraba Williams cruzando en exceso en el 76' justo antes de que entrara Beñat al campo y Lekue por el lesionado De Marcos. Mala racha lleva el de Laguardia sin duda, una pena, su empuje es clave.Etxeita casi hace el tercero en recta final ante un Alavés que hizo helarse de frío a Iago Herrerín en su tercera tarde consecutiva como tiular en liga. Volvió a dejar la puerta a cero el cancerbero de Basurto, que de momento -con o sin Kepa- cumple con nota alta cuando sale. Ya en el descuento Sabin Merino gastó el último cambio, pitado porque se esperaba a Yeray (al que se coreó), dando un mínimo descanso al incombustible goleador Aritz Aduriz.