El increíble año internacional de Unai Simón

Ya recordarán los lectores de ElDesmarque Bizkaia que el portero del Athletic Club Unai Simón comentaba en su retorno a entrenar en Lezama tras la final de los Juegos Olímpicos de Tokio, que "nunca volveré a vivir un año como este". Y sin duda el cancerbero de Murgia ha acertado de pleno. Ha sido una campaña en la que no ha dejado de sumar partidos, finales y experiencias únicas en su vida como profesional.

Este mismo domingo era titular en el triunfo de España ante Suecia en la Cartuja de Sevilla, un campo que ya debe conocer como si fuera San Mamés, en el que la selección de Luis Enrique obtenía la clasificación como líder de grupo para el mundial de Qatar del año 2022.

Un choque más cabe pensar, pero lo cierto es que le catapulta como una figura principal de las selecciones españolas. Con el duelo ante los Isak, Ibrahimovic y cía. Simón, tan solo en el año de calendario 2021, ha jugado para España nada menos que 24 veces (incluidos los Juegos Olímpicos).

Para poner en su justo valor ese dato de Unai Simón hay que destacar que escasamente 109 futbolistas han disputado más de 24 partidos con España en toda la historia.

Unai Simón ha vivido una temporada inigualable a nivel internacional

Sin duda es un año que condensa casi la vida deportiva de varios futbolistas. Ha jugado (y ganado) una final de la Supercopa de España, dos de copa del rey, una semifinal de una Eurocopa, una final de unos juegos olímpicos, otra de la Liga de Naciones y se ha clasificado para la disputa de un mundial.

Como apuntaba la Adurizpedia de Roger Álvarez, Unai Simón, a sus 24 años, ha igualado este domingo en Sevilla las 20 internacionalidades de Víctor Valdés y ya está entre los diez guardametas con más partidos en la historia de la selección absoluta.

En su trayectoria de este 2021 deja en su CV ocho porterías a cero, tres prórrogas disputadas, dos tandas de penaltis y una final de Nations League perdida con el protagonismo del VAR ante la Francia de Mbapeé, Pogba y Benzema. Y aparte, claro, una medalla olímpica de plata tras caer ante Brasil en la lucha por colgarse el oro del cuello.