El presidente del Girona insinúa que el Xerez jugó primado y pedirá una investigación

Al final del partido y ante la lógica decepción del resultado, el presidente del Girona, Joaquim Boadas, hizo unas declaraciones que levantarán ampollas porque insinúa que el Xerez jugó primado y que pedirá que se investigue el partido.

Tras explicar que había bajado al vestuario a dar ánimos a la plantilla ya decirles que "no son ni mejores ni peores y que las opciones siguen intactas", Boadas insinuó que los jugadores del Xerez habían venido primados por algún que otro equipo porque, según él, "si hubieran jugado así toda la temporada quizás ahora estarían luchando con nosotros para subir a Primera". "No sé por qué factor iban tan espoleados. Si hubieran jugado así todo el año, estarían luchando con nosotros para subir", añadía.
Boadas se iba embalando cada vez más hasta el punto de que acabó por decir, visiblemente alterado por la inesperada derrota, que "pediremos que se investigue". El presidente explicó que durante la semana "nos estaban mirando mal a nosotros" y ahora resulta que "quizás son los otros los que quizás han hecho algo. Lo encuentro extraño, parecía como si se pudieran salvar". Boadas negó que el Girona quiera emprender acciones contra el Xerez pero sí aseguró que pedirán que se investigue. "Aquí hay algo raro", decía. En este sentido, Boadas recordó que "está tan penalizado pagar para ganar como para perder".