Nuevas trabas para un nuevo Xerez
Ya lo advirtió Javier Tebas. No pondría las cosas fáciles a los clubes que intentaran refundarse sin hacer frente a la deuda contraída, algo que afecta considerablemente al Xerez Club Deportivo, cuyo futuro como institución está en peligro y sobre cuya cabeza vuelta el fantasma de la liquidación.
Pues bien, la Real Federación Española de Fútbol ha hecho público el Reglamento General 2013/2014, que contiene, entre otras, la modificación del artículo 104, donde se incluye una novedad importante que obligará a los nuevos clubes a asumir las deudas de sus predecesores cuando estos últimos desaparezcan o dejen de competir.
En concreto, el Reglamento dice lo siguiente al respecto:
Cuando un club desaparezca o deje de competir sin liquidar las deudas antedichas, la obligación en el pago recaerá sobre el club de nueva creación que, con independencia de su denominación, comparta alguna de las siguientes circunstancias con el club desaparecido o que haya dejado de competir:
- Que dispute partidos en el mismo campo o terreno de juego, incluso en el supuesto de que variara su denominación.
- Que disponga del mismo domicilio social.
- Que alguno de los fundadores o directivos del nuevo club, lo fuera del club desaparecido.
- Que el club de nueva creación y el desaparecido tengan la misma estructura deportiva de base.
- Que utilice una equipación de juego igual o similar.
- Que utilice un escudo similar.
- En general, cualquier indicio que induzca a la confusión entre ambos clubes y cuando exista similitud o identidad objetiva y subjetiva entre ambos clubes.
El presidente de la Liga de Fútbol Profesional habla de mediados de junio como plazo para conocer qué ocurrirá con el Xerez, si se plantea la liquidación o continúa adelante, pero lo cierto es que los días avanzan sin soluciones y la situación es cada vez más enrevesada. Muchos dan por hecho que la refundación es la única salida para sanear al club, pero queda claro que escapar de la nefasta gestión que ha llevado a la entidad a la quiebra y el caos no será tan sencillo. Ni siquiera intentando renacer.
