Iván: "Lloré de impotencia y rabia por fallar"

Iván Asencio terminó el partido contra el Chipiona con las lágrimas en los ojos por la emoción vivida. Primero por lo que suponía ganar ante la afición azulina y segundo por el dolor que le producía haber fallado alguna clara ocasión.

"Fue un día alegre por los tres puntos que logramos, pero personalmente no me salieron bien las cosas, vi a mucha gente conocida y los nervios pudieron conmigo. Lloré de impotencia y de rabia porque no suelo fallar las ocasiones que tuve, pero me quedé bloqueado. Me pude haber ido con dos goles, pero no pudo ser y hay que seguir trabajando", explica a ElDesmarque Jerez.
El delantero celebra la comunión que hay tanto dentro como fuera del vestuario: "Somos jugadores que nos conocemos desde hace años por habernos enfrentado muchas veces y que ahora estamos compartiendo el sueño de jugar en el Xerez. Además, tenemos la suerte de tener una afición que nos apoya y que siente lo mismo que nosotros por este escudo".