Partido ganado al Racing, al VAR y a los elementos

El Cádiz CF se llevó los tres puntos de Santander en un partido donde no faltó de nada. El equipo de Cervera hizo méritos para conseguir un triunfo con algo de claridad, pero no pudo cantar victoria hasta el minuto 97 porque la actuación arbitral dejó muchísimo que desear. Finalmente fue el propio VAR el que le devolvió lo que le había quitado previamente.

El equipo amarillo saltó en El Sardinero con tres cambios en el once. Marcos Mauro estrenaba titularidad en la presente temporada, al igual que José Mari, y la gran novedad era ver al Choco Lozano debutando con la camiseta amarilla. Y el Cádiz se debió poner por delante a los diez minutos porque el árbitro no señaló un claro penalti sobre Marcos Mauro a la salida de un córner por un agarrón.

Como casi siempre, la posesión era del rival pero al equipo se le veía bien colocado y con las ideas muy claras. Cuando cruzaba el centro del campo lo hacía para pisar el área local con cierto peligro, pero no había un claro dominador. El Racing buscaba a Lombardo y a Nahu como referencias en su ataque y Cejudo se dejaba notar con su calidad.

Pasada la media hora no había pasado casi nada en las áreas a excepción del penalti. Estaba el partido bajo control, pero hacía falta que se desgastara más el animoso equipo de Iván Ania. Costaba mucho cualquier control porque todos estaban muy encima de todos y no había manera de encontrar espacios.

Pero líder estaba sembrado y en el minuto 33 se puso por delante en una buena acción colectiva en la que Perea recibió en el segundo palo tras un centro de Salvi y el albaceteño definió con calidad para batir a Luca Zidane. La cosa se ponía a pedir de boca y había que seguir trabajando, pero ya con tranquilidad extra de verse por delante. El Racing dio el susto con una buena combinación entre Yoda y Lombardo, pero el centro de éste no encontró rematador.

La segunda parte empezaba con la sensación de que el Racing empezaría apretando, pero el Cádiz pegó de nuevo en el minuto 52. Una buena dejada de Lozano a Álex acabó con el balón a Salvi y el centro de éste lo cabeceó en el segundo palo el madrileño después de que le quitaran el remate al Choco cuando se aprestaba a empujar el balón. Increíblemente el tanto fue anulado por un supuesto fuera de juego.

Esto le dio fuerza al Racing, que ya se veía con 0-2 porque nadie en el estadio había protestado nada en la jugada del gol. Ania sacó a Barral y David Rodríguez para aprovechar esa segunda oportunidad que le había dado Iglesias Villanueva. Al Cádiz pareció darle un bajonazo por perder esa ventaja y le concedió demasiado campo a su rival.

Cervera metió a Alejo por José Mari y Álex bajó al mediocentro junto a Garrido para que Perea hiciera de enlace con el Choco. Pero al equipo le duraba muy poco el balón y con un cuarto de hora por delante todo se encaminaba hacia un sufrimiento innecesario por haber marcado un tanto legal.

El partido se rompía y había espacios para las contras amarillas. Querol entraba por Lozano y el equipo desaprovechaba un par de llegadas claras para matar el partido. Y como el fútbol es una locura, en un córner se produjo una mano de Cala y el árbitro, por supuesto, pitó penalti a falta de seis minutos. Cifuentes lo paró, también el rechace, pero a la tercera marcó Barral.

Quedaban unos minutos y quedaba tela por cortar. El Cádiz estaba furioso por todo lo que le habían quitado y se veía sólo con un punto en el zurrón. Y pudo haber ganado en una ocasión final en la que Salvi mandó el balón al palo y el posterior remate de Alejo lo evitó un defensa racinguista. Pero como el guión del partido parecía de Hitchcock, el árbitro pitó penalti porque le dio con la mano. Álex Fernández lo transformó y llegó una victoria, otra más, que hacía justicia por lo visto en el partido.