El Cádiz se encomienda al Nuevo Mirandilla para alejarse del precipicio

El Cádiz y el Valencia dirimen este domingo un duelo vital por la permanencia en el Nuevo Mirandilla, donde se examinan dos equipos que se encuentran en la cola de la tabla y luchando a brazo partido por seguir fuera de los puestos de descenso, de los que salieron la pasada jornada los valencianos, y evitar caer a Segunda División.

Los gaditanos, que entre marzo y abril sólo han ganado un partido de los últimos ocho (0-2 al Betis el día 9 de este mes), son decimoséptimos con 32 puntos, a uno solo del último puesto de descenso que marca el Getafe, mientras que los valencianistas son decimosextos con uno más que el Cádiz y a solo dos de ese pozo, del que sacaron tímidamente la cabeza con su último y crucial triunfo ante el Valladolid (2-1), otro rival directo.

El Cádiz debe volver a hacer del Nuevo Mirandilla un fortín

El partido, por ello, se presume de una lucha total entre dos equipos acuciados y que harán todo lo posible por que no les pueda la ansiedad ni la presión de su delicada situación. En el caso del Cádiz, después de que le haya visto las orejas al lobo tras encadenar tres derrotas en su estadio Nuevo Mirandilla.

Y es que el conjunto entrenado por Sergio González ha sufrido un cambio total de baremo en este aspecto, después de que hubiera permanecido anteriormente seis meses sin conocer la derrota en casa, donde el Cádiz no caía desde septiembre y volvió a hacerlo a primeros de abril ante el Sevilla (0-2), rompiendo una racha de once partidos seguidos sin perder en su campo.

Después, otras dos derrotas frente al Real Madrid (0-2) y Osasuna (0-1) han cercenado la fortaleza casera de los de Sergio, que se siguen asiendo a la permanencia gracias a sus buenos resultados más recientes a domicilio, con el citado triunfo ante el Betis (0-2) y tres empates contra la Real Sociedad, Almería y Espanyol, estos dos últimos rivales directos también.

En este Cádiz-Valencia también puede ser importante qué equipo de los dos se hace con el coeficiente particular de goles, después de que los gaditanos vencieran el pasado 6 de enero en Mestalla (0-1) con un gol de Rubén Alcaraz.

Sergio recupera para este partido a uno de sus jugadores más importantes en el centro del campo, el argentino Gonzalo Escalante, una vez superada su lesión, aunque pierde por distintas dolencias al central Víctor Chust y al delantero Roger Martí, quienes fueron titulares la pasada jornada y sufrieron problemas físicos ante Osasuna.

El Valencia llega al Nuevo Mirandilla en puestos de permanencia

Por su parte, el Valencia afronta este encuentro reforzado por haber logrado encadenar por primera vez en esta Liga dos victorias seguidas, al haberse impuesto en el campo del Elche y este jueves en Mestalla ante el Valladolid.

Esos seis puntos le han permitido salir del descenso y le deben permitir jugar en el Nuevo Mirandilla sin tanta angustia.

El triunfo ante el equipo pucelano tuvo además un importante impacto emocional puesto que llegó con una remontada en la segunda parte que culminó con un gol del canterano Javi Guerra en el tiempo de prolongación y que llevó la euforia a las gradas de Mestalla.

Esa descarga de adrenalina se espera que ejerza también un refuerzo positivo en un equipo que se había quedado agarrotado con los malos resultados. No obstante, el juego del equipo de Rubén Baraja fue muy pobre en la primera parte, noqueado por el grave error de Mouctar Diakhaby que permitió adelantarse al Valladolid al poco de empezar.

La mejoría del Valencia llegó con la entrada en el descanso de Hugo Duro y el cambio de dibujo al 1-4-4-2 pero queda la duda de qué sistema usará Baraja después del buen funcionamiento que tuvo el 1-5-3-2 en Elche.

Para este encuentro, el técnico mantendrá la duda hasta última hora de Thierry Rendall y Samu Castillejo, que se han perdido los últimos encuentros. En cualquier caso, dado que apenas habrá menos de 72 horas entre un choque y otro el técnico podría tratar de refrescar al equipo con rotaciones, tal y como admitió en rueda de prensa.

Las novedades podrían darse en la medular donde el damnificado sería Yunus Musah por Ilaix Moriba o Javi Guerra, así como en la delantera donde Hugo Duro podría mandar al banquillo al brasileño Samuel Lino.