Iballa Ruano, la reina española de las olas que ha hecho historia en el surf

Salimos de la península en el camino que ElDesmarque e Iberdrola estamos recorriendo de la mano. Nos vamos hasta Pozo Izquierdo, un pequeño pueblo de la isla de Gran Canaria donde nació Iballa Ruano, que ha vivido en las últimas dos décadas saltando de título mundial en título mundial, hasta completar diez en windsurf y uno más en stand up paddle. Una auténtica campeona que surca las olas y que se ha convertido en el referente de muchas deportistas, demostrando, de nuevo, que #EllasValenOro.

Iballa nació en 1977 en Pozo Izquierdo, un pueblecito canario famoso por el windsurf -aunque antiguamente sólo lo practicaban los turistas-, pero no fue hasta 1994 cuando probó por primera vez el windsurf que tantas alegrías le ha traído hasta ahora. ¿Y lo mejor? Fue pura casualidad. "Una vez, un vecino que tenía una tabla de iniciación y la quería tirar a la basura, nos la ofreció y la cogimos. Y éramos un grupo de cuatro colegas y entre todos recolectamos entre los turistas las piezas de windsurf y empezamos los cuatro con un equipo reutilizado", cuenta Iballa desde el salón de su casa en el pueblo, mientras el gato de su hermana Daida se pasea por el sofá y las escaleras.

Y precisamente de Daida, su hermana gemela, nos habla sin cesar Iballa. "Lo digo en plural porque las dos hemos hecho lo mismo desde pequeñitas", cuenta la canaria, a la que le resulta difícil hablar sólo de ella cuando se refiere a sus éxitos en el windsurf. Dicen que los gemelos siempre golpean dos veces, pero ellas han llegado a golpear 28: "Mi hermana tiene 18 títulos mundiales y yo diez. O sea, 28 entre las dos desde 1999 hasta el año pasado".

Esa relación tan especial entre las hermanas ha sido clave en los logros de ambas. "Hemos hecho un equipo y gracias a eso, año tras año, fuimos mejorando nuestro nivel en el agua", confiesa Iballa, añadiendo que, en los últimos años, con su dedicación al paddle y la de Daida a la fisioterapia, la forma de pasar el tiempo juntas ha cambiado, "pero unidas como siempre". La conexión de estas gemelas las ha ayudado a "mejorar en todos los deportes y en la vida en sí, dentro y fuera del agua. Sin la una o la otra no hubiéramos llegado a donde estamos".

Eso ha hecho que la competitividad entre las dos llegue a otro nivel, difícil de comparar para quien no se haya visto en su situación: "Yo la llamo positiva porque nos ha ayudado a avanzar y a mejorar en el agua. Cuando estamos en el agua, nos miramos la una a la otra y nos empujamos". Tanto, que las dos tuvieron que tomar la difícil decisión de dedicar su vida al deporte en una época complicada, hace ya 20 años. Pero la jugada les salió bien. Iballa tiene en Daida a su referente en el windsurf, sin siquiera salir de casa: "Para mí ha sido una gran campeona dentro y fuera del agua y un ejemplo a seguir".

Muy recientemente, durante el confinamiento por el coronavirus, Daida ha sido madre por primera vez. A Iballa, el estado de alarma la pilló en Fuerteventura y tardó tres semanas en poder volver "a casa". Una vez en Pozo Izquierdo, tuvo que esperar tres largas semanas antes de poder ver a su hermana y a su sobrino, algo realmente complicado ya que viven puerta con puerta.

En solitario, Iballa también triunfa

Iballa Ruano puede presumir de ser la primera deportista española que ha logrado dos títulos a nivel mundial en dos deportes diferentes en el mismo año. El sueño de cualquiera que prueba una modalidad nueva en algún punto de su carrera. "La sensación fue increíble, superespecial", relata la canaria sobre el momento en que supo que había logrado tal proeza hace un par de años, en la temporada de 2018.

"Mi sueño siempre ha sido ese. Al principio, con el windsurf, quería ser campeona del mundo y vivir del deporte, que eso siendo mujer, canaria… era difícil, pero pudimos salir adelante. Cuando empecé con el stand up paddle no dormía por la noche, sólo soñaba con hacerlo lo mejor posible, con llegar a ser campeona del mundo y hace dos temporadas hice mi sueño realidad. Quedar campeona en los dos deportes… a más que eso no se puede aspirar". Iballa lo tiene claro.

"Este año estuve a punto de retirarme, pero me volvió la motivación", cuenta cuando se le pregunta qué motivaciones le quedan después de haber vivido 20 años en la élite del windsurf y haber topado con la cima del stand up paddle. "Acabé el mes de diciembre bastante cansada y vino todo esto del coronavirus, pero ahora que estoy en la primera línea de frente, vamos a seguir luchando para llegar a lo más alto del pódium, igual que siempre y sobre todo, lo más importante es disfrutar del camino".

Aprovecha las bondades de cada una de las disciplinas acuáticas que practica para mejorar en la otra, aun siendo consciente de que son completamente diferentes. Y se explica: "La base de todo es el surf y las dos disciplinas que practico comparten las olas. Cuando no hay viento hago SUP y tener el remo en la mano me ayuda muchísimo, como si tuviera la botavara en la mano con el windsurf. Para mí es como si fueran el fútbol y el baloncesto, que en común sólo tienen el balón. Pues en este caso igual, pero con las olas: dos deportes muy diferentes pero con algo en común. Lo bonito de los dos es que siempre estamos aprendiendo y disfrutando del mar, que es lo más bonito de estos deportes", señala.

Pero, ¿con cuál disfruta más Iballa? ¿En cuál se siente más realizada? "En los dos. El SUP es más o menos nuevo y siempre estás aprendiendo y en windsurf llevo ya muchos años, pero un día con condiciones ideales para el windsurf no me lo quita nadie".

Un confinamiento sin mar

El tiempo de encierro al que ha obligado la pandemia del coronavirus ha sido la etapa más larga de Iballa sin entrar en contacto con el agua del mar. Y no ha sido una temporada fácil en ese sentido: "Para ponerte en situación, el primer día que pude ir al agua, cuando el Consejo Superior de Deportes y las federaciones nos dieron el 'pasaporte' para entrenar, me fui a navegar aquí a la playa de Pozo Izquierdo. Y menos de una hora después salí del agua mareada, queriendo vomitar y esa sensación nunca me había pasado", cuenta ahora entre risas la canaria.

"Fue un poquito duro, pero no sólo para mí, para todo el mundo. Pero dentro de lo malo, lo pasamos lo mejor posible. En Canarias no hemos tenido tantos casos como en Madrid o Barcelona y bueno, nos podemos quejar, pero lo más importante es la salud y lo demás es pasajero y esperemos que no vuelva a recaer", desea Iballa.

Aunque emocionalmente ha sido duro, el confinamiento le ha servido a la windsurfista para coger un gran tono físico. Antes, los entrenamientos en el mar no le permitían más que tres días de dedicación puramente física a la semana. Pero el tiempo libre le ha concedido la oportunidad de trabajar a diario en el rodillo con la bicicleta y, con un pequeño gimnasio en casa, hacía hasta dos sesiones al día y se ha puesto "más fuerte" gracias a las directrices de su hermano Echedey, preparador físico. Porque sí, su hermano también está vinculado al deporte.

En casa de los Ruano siempre han convivido con el deporte. El padre ha estado siempre muy vinculado al fútbol y las gemelas, antes de dedicarse de pleno al windsurf, practicaron atletismo, baloncesto e incluso bodyboard y surf. "Nuestros padres siempre nos apoyaron muchísimo, primero a estudiar, que eso era lo más importante, y después a combinarlo con el deporte, cualquiera que nos gustara", relata Iballa.

Las MorenoTwins, una lucha constante por la igualdad

Estas gemelas llevan varios años luchando por lograr la igualdad en su deporte. Sobre todo en el windsurf, ya que Iballa recalca que en el paddle surf siempre ha encontrado mucha equidad. Entre las dos, junto a su club deportivo, organizan en Pozo Izquierdo una de las pruebas del PWA, la serie de campeonatos mundiales de windsurf. Fue la primera prueba a nivel global en la que los premios otorgaron la misma cantidad de dinero a la categoría femenina y a la masculina. Todo un hito.

"Daida estuvo en el Senado proponiendo todo este cambio y creo que fue algo muy positivo", explica Iballa. "A ver si seguimos todos en esa línea y que finalmente se vea como algo normal", ya que, comenta, "a día de hoy, sólo nuestro evento equipara el dinero en premios, pero aunque se escuchan comentarios negativos, son más los positivos, así que vamos a quedarnos con eso".

Este año no han podido organizar la competición y han tenido que posponerla a 2021 por el coronavirus. De hecho, lo más probable es que no se hagan campeonatos de windsurf en todo 2020. Pero está previsto que las competiciones de stand up paddle vuelvan en septiembre.

Como ventana al mundo, las gemelas tienen un perfil en Instagram, @MorenoTwins, en el que dan a conocer no sólo sus disciplinas en el agua sino su vida fuera del mar. "Nos representa, enseñamos no sólo los deportes que practicamos, sino nuestra vida diaria y es una buena ventana para mostrarnos".

Quince preguntas para conocer mejor a Iballa Ruano

Iballa Ruano participa en el test de preguntas rápidas de ElDesmarque. Quince curiosidades que nos permiten conocer cuál es su ola perfecta, su animal de compañía preferido o qué libro se está leyendo. Con sus respuestas, la windsurfista nos muestra su lado más humano, el que sale a la luz cuando está fuera del mar.