El gesto de Marchena que salvó la victoria de España en la final del Mundial 2010 ante Holanda
Hace nueve años, un 11 de julio pero en 2010, Andrés Iniesta anotaba el gran gol de la historia del fútbol español. El manchego anotó el tanto que le daba a España el primer Mundial de su historia, pero no fue el único héroe de ese choque. También se lució Iker Casillas con sus paradas a Robben y el resto del equipo cuajó un partidazo, pero no podemos olvidar la actuación fundamental de Carlos Marchena.
Pese a que el central sevillano no disputó ni un minuto de la final, como buen defensa fue capaz de evitar un posible gol. Esto se debió a una situación que podría haber sido surrealista en caso de haberse producido por lo novedoso dentro del fútbol de primer nivel.
Cuando Iniesta marcó ese tanto histórico, la alegría se apoderó de todos los jugadores españoles. Titulares y suplentes corrieron hacia el córner donde el jugador del Barcelona se dirigía con esa camiseta legendaria en recuerdo a Jarque.
Todos, menos dos, Iker Casillas y Carlos Marchena. El por entonces central del Valencia entró al terreno de juego jugándose la expulsión en una imagen que recordó recientemente en un acto promocional.
Al haber salido todos los jugadores españoles del rectángulo de juego (estaban en una esquina del Soccer City), Holanda podría haber sacado de centro pillando sólo a Casillas sobre el verde. Sin embargo, al entrar un jugador ilegal como fue Marchena, el árbitro no podía permitir ese saque rápido de la 'Oranje'.
"No me lo esperaba ni yo. Viene un poco también por haber jugado mucho en la calle, sin árbitros... era la típica de sacar rápido y te la hacían. Y se me pasó por la cabeza: '¿Después de tantos años, que nunca hemos sido campeones del mundo, ¿nos van a hacer esto ahora?'", rememoró el exfutbolista.
