El contenido disponible en esta sección está restringido para menores de 18 años.
Debe confirmar que tiene más de 18 años para acceder.
"Historia rojiblanca", celebró el Atlético de Madrid en sus redes sociales la ampliación de contrato hasta 2025 del central internacional uruguayo José María Giménez, que reafirma su continuidad en el club al que llegó con tan solo 18 años en 2013 para ganar dos Ligas, una Liga Europa y dos Supercopas.
Su vínculo anterior alcanzaba hasta 2023; el nuevo lo alarga por dos años más, hasta el 30 de junio de 2025, para un futbolista que lleva ya ocho campañas en el Atlético -nueve con la que comenzará el próximo domingo como titular frente al Celta en Balaídos- y que ha personificado siempre la frase tan extendida, habitual y sonora del fútbol de darlo todo por el equipo sobre el terreno de juego.
❤️ Historia rojiblanca 🤍 pic.twitter.com/RxUKxvctr5
— ❤️🤍🏆 CAMPEONES 🏆❤️🤍 (@Atleti) August 12, 2021
Sin una sola duda. Para tirarse de cabeza a ras de suelo para frustrar la ocasión rival, saltar más que nadie en un duelo aéreo y asumir un rol transcendente en su equipo, crucial para su entrenador, Diego Simeone, en cuanto superó aquel periodo inicial de adaptación y aprendizaje cuando llegó con sólo 18 años en 2013.
Fichado de Danubio, ya iniciada la era del técnico argentino, su primer curso fue de entrenamiento. Afianzados en el centro de la defensa Joao Miranda y Diego Godín, una pareja para la historia del club rojiblanco, no jugó más que dos partidos: el de su debut en la Liga el 14 de septiembre de 2013 ante el Almería (4-2) y el de la Copa del Rey frente al Sant Andreu en el Vicente Calderón (2-1).
Su 'máster' defensivo, a las órdenes de Simeone, al lado de Miranda y Godín, desembocó en el título de la Liga de 2013-14 en el Camp Nou contra el Barcelona; el principio de una aventura ganadora del central uruguayo, preparado para dar el salto al siguiente curso, entre las lesiones de Godín y Miranda o las rotaciones.
En 2014-15 ya disputó 28 encuentros oficiales, 16 de titular. Después, en el verano de 2015, Miranda salió rumbo al Inter. Había llegado el momento de confirmarse en el Atlético, junto a Godín, en competencia con Savic, su compañero ahora habitual en el centro de la zaga, también renovado el miércoles hasta el 30 de junio de 2024.
La campaña 2015-16 fue su confirmación definitiva: 37 partidos, 36 de titular, aunque no fuera el elegido para el once en la final de la Liga de Campeones -Simeone dio la titularidad a Savic-, quizá por esa condición imprevisible que aún desprendían las acciones defensivas de Giménez y que ha ido solucionando con la experiencia.
En 2016-17 disputó 29 partidos, 23 de titular; en 2017-18 jugó 38 duelos, 31 de inicio, para ser campeón de la Liga Europa... Y después de la Supercopa de Europa en 2018-19, cuando disputó otro 29 choques, pero también cuando las lesiones lo apartaron de 17 encuentros, igual que lo alejaron del once en 15 duelos en 2019-20.
Las dolencias musculares frenaron entonces, por tramos, toda su innegable importancia en las alineaciones de Simeone, aunque jamás alteraron la transcendencia y la confianza en él del técnico, hasta el punto de que el conjunto rojiblanco rechazó la millonaria oferta que propuso el Manchester City para ficharlo en el verano de 2020.
El pasado curso, en 2020-21, también padeció las lesiones, terminó con 26 partidos entre todas las competiciones, pero, a la vez, también fue inalterable su condición de titular cuando estuvo a disposición de Simeone para ganar LaLiga Santander; la segunda ya con el Atlético, con el que agranda ahora su vínculo. Quiere más.
Buen central