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Las cinco claves de la trigésimo séptima jornada de LaLiga Santander fueron:
1 - El penalti de Jorge Molina
La crudeza del fútbol, la cara más amarga, le tocó vivir a sus 40 años a Jorge Molina. De héroe goleador a quedar para la historia como el jugador que desperdició la ocasión más clara para sellar la permanencia. El final más trágico con un giro del destino inesperado. Un penalti sin Luis Milla en el campo, lanzador habitual del Granada que se tuvo que retirar por una lesión. El partido estuvo en el duelo de viejos rockeros.
Jorge Molina ante Diego López, que adivinó el lado de un disparo cruzado que se marchó cerca del poste. La presión máxima, las situaciones límites, generan bloqueo. Lo sufrió el equipo que mejor encaraba la última jornada, en su estadio, ante su afición, frente a un rival que ya nada se jugaba. El Granada pasa en unos meses de quedarse a puertas de Europa en una temporada histórica con Diego Martínez, a un doloroso descenso que no pudo salvar la racha iniciada con la llegada de Aitor Karanka.
2 - El Cádiz obra el milagro
Era el equipo que peor lo tenía antes del inicio de la última jornada, pero el Cádiz y toda su afición, son un equipo especial. El optimismo marcó cada día previo a la visita a Mendizorroza, donde las piernas pesaron más de lo debido en la primera mitad. El equipo de Sergio González se desató en la segunda para firmar el triunfo que necesitaba cuando el Choco Lozano se vistió de héroe.
En el minuto 76, solo tres después de entrar al terreno de juego, mandaba a la red con un remate en carrera de puro 9, un centro desde la banda derecha de Iza. El sufrimiento hasta el final estaba garantizado a la espera de que el Granada no marcase y en una jugada en la que el árbitro tuvo que revisar una jugada tras ser avisado desde el VAR. El final feliz deja a la 'tacita de plata' en la élite del fútbol español.
3 - Aguirre salva al Mallorca
El cambio en el banquillo del Mallorca y la llegada del mexicano Javier Aguirre acabó siendo decisiva para sellar la deseada salvación del equipo balear por segundo año consecutivo. El empate de mérito en el Ramón Sánchez-Pizjuán y el triunfo ante el Rayo, cambiaron el panorama para la última jornada.
Dependía de sí mismo en El Sadar y no hubo margen para el error. El tanto de Ángel Rodríguez, nada más iniciarse la segunda mitad, y de Grenier, redujo las dosis de sufrimiento para la afición mallorquina. Aguirre, especialista en situaciones límite, lo volvió a hacer. Salvó a un equipo de la quema y seguirá al mando del Mallorca la próxima temporada.
4. El primer triunfo de Emery al Barça tiene premio
Llevaba trece visitas al Camp Nou y todo eran derrotas. Alguna tan dolorosa, como aquella remontada europea repleta de polémica cuando dirigía al PSG (6-1). Se quitó la espina Unai Emery en un momento importante. Habría sido extraño ver al Villarreal fuera de competición europea el próximo curso después de ganar la pasada campaña la Europa League y llegar este curso a unas históricas semifinales de 'Champions'.
Los goles de Pedraza y Moi Gómez sellaron el séptimo puesto y el pase a Liga Conferencia. El Athletic Club se quedaba sin opciones porque el Barcelona decidió cerrar con poca gana un año de descrédito, sin títulos y con capítulos que debe enterrar cuanto antes. El Camp Nou despidió con decepción a sus jugadores y con el deseo de que, bajo el mando de Xavi, todo cambie desde el próximo agosto.
5. El Atlético de Madrid gana el pulso de la tercera plaza al Sevilla
Había 7 millones de euros de diferencia entre acabar tercero y cuarto de LaLiga Santander (45,5 millones y 38,5), pero sobre todo defender el honor del último campeón hasta el final. Así hizo el equipo de Diego Simeone para acabar en el podio de la clasificación. Nunca se bajó de él con el técnico argentino al mando y lo volvió a lograr con un partido muy serio en el Reale Arena, con los tantos de Rodrigo De Paul y Ángel Correa.
La firmeza del Atlético dejó sin premio el esfuerzo del Sevilla en el Ramón Sánchez-Pizjuán. Acabó encontrando el triunfo trabajo gracias al tanto de Rafa Mir, pero el equipo de Julen Lopetegui acaba cuarto, cumpliendo el objetivo de estar en la próxima edición de la Liga de Campeones, pero un curso más, sin dar el salto para pelear por el título hasta el final, tras ser el único que aguantó buena parte de la temporada el ritmo del campeón, el Real Madrid.