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A falta de poco menos de dos meses para el cierre del mercado de fichajes, el Real Madrid se ha ido retirando de las pujas que están rondando en Europa. Florentino Pérez hizo los deberes antes de final de la pasada campaña y desde junio ya tiene cerrado, para bien y para mal, los grandes nombres que tenía en su agenda.
El rechazo de Kylian Mbappé y la llega de Antonio Rüdiger y Tchouaméni han sido los únicos capítulos en los que el Real Madrid había entrado en lo que a fichajes se refiere. Desde entonces, se han habado estas semanas más en las salidas que en llegadas. En el aire aún sigue la necesidad de un delantero para dar descanso a Karim Benzema a lo largo de la temporada. Sin embargo, el club blanco no tiene intención de hacer operaciones costosas y, viendo como está el mercado, Florentino no quiere cometer ninguna locura.
Algunos grandes nombres quedan en el mercado como Gnabry, Neymar e incluso el regreso de Cristiano Ronaldo. Sin embargo, la directiva blanca considera que la única incorporación que haría sería la llegada de un jugador joven en la zona de ataque. Nombres como Borja Mayoral son los que ahora rondan en la cabeza de Florentino y Carlo Ancelotti. Además, hay que añadir la gran masa salarial que tiene actualmente el club blanco, impidiéndole hacer grandes operaciones si no salen más jugadores.
El Real Madrid, por el momento, no tiene planteado firmar más estrellas. Las grandes cifras que se manejan unido a la feroz competencia de los clubes ingleses hace muy difícil firmar jugadores sin un desembolso económico importante. Sin embargo, en el mundo del fútbol, no se puede decir nada hasta el cierre de mercado. Aún así, todo indica que el Real Madrid no será candidato de llevarse más jugadores top este verano.