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El temor deportivo que se vivía en Francia era una angustia para los aficionados al fútbol. La clara posibilidad del descenso a la Liga B era una realidad ante la irrupción de Dinamarca y solo estaban a una derrota de cosechar ese descenso. No obstante, los hombres de Deschamps sacaron todo su arsenal con el objetivo de llevarse los tres puntos de forma obligatoria. Y después de cinco jornadas, finalmente lo consiguieron.
El encuentro no empezó de la mejor manera, ya que Koundé tuvo que retirarse lesionado y Saliba lo sustituyó. Una mala noticia para el FC Barcelona, que puede perder a una pieza clave de la defensa. Con ese contratiempo, el partido siguió adelante y ninguna de las dos plantillas fue capaz de dar un paso adelante. Por ello, el resultado de 0-0 continuó hasta el descanso.
No estaba agradando ni el juego de Francia ni el empate a los aficionados, que comenzaban a ponerse nerviosos. Pero por fin apareció su estrella para dar calma a su país. Kylian Mbappé, con un gran gol, abrió la lata del encuentro y puso por delante a los franceses. Con ese resultado, le cedían el puesto de colista a Austria, por lo que era muy necesario continuar por esa línea.
Oliver Giroud se encargó de ampliar el marcador con otro gol que sentenció las posibilidades de los austriacos. Por fin, la plantilla francesa comandada por Deschamps era capaz de ir por delante en el marcador sin que hubiera remontadas de por medio. Poco pudo hacer Austria ante una superioridad francesa más que evidente y el partido acabó con victoria para el combinado galo.
De esta manera, Francia se coloca un punto por encima de Austria. Aunque matemáticamente no se ha salvado, ya dependen de sí mismos para conseguirlo. Pero lo más importante es que ya han logrado salir de ese pozo en el que se encontraban.