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Este miércoles el Real Madrid jugará su último partido de fase de grupos de la Champions League. Los de Ancelotti deberán ganar al Celtic para asegurar la primera plaza y tener así un rival más asequible en octavos de final.
El conjunto blanco no está en su mejor momento en estas últimas semanas. El empate contra el Shakhtar y la derrota contra el RB Leipzig les han impedido cerrar el grupo como primeros. En ambos partidos se vio un Real Madrid gris en el que las bajas y el mal juego han sido culpables de haber llegado a esta situación.
Sin embargo, el punto positivo es que el equipo escocés ya no se juega nada al estar ya fuera de toda posibilidad de jugar esta temporada en Europa. En la ida, el conjunto merengue no tuvo complicaciones para ganar un partido. El Real Madrid ganó 0-3 gracias a los goles de Vinícius, Modric y Hazard, todos en el segundo tiempo.
En este caso, Karim Benzema sigue preparándose para llegar a la cita de Champions y ayudar al equipo en la falta de pólvora que se está viendo en los últimos partidos. En el caso de que el Leipzig no fallara en su partido contra los ucranianos, los de Ancelotti estarían obligados a ganar.
Por lo tanto, el Real Madrid deberá jugar con la máxima intensidad para evitar que el partido se atasque desde el principio. Los primeros tiempos se les están atragantando a los merengues y ya han tenido varios avisos para cambiarlo. En principio, se trata de un duelo asequible para que ganen sin complicaciones, por lo que sus posibilidades de seguir acabando como cabeza de grupo siguen siendo bastante altas.