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El FC Barcelona tiene su última gran cita antes del Mundial de Qatar. El equipo de Xavi sabe de la importancia máxima de ganar el partido para seguir peleando por ganar la Liga. Para ello, el conjunto culé tendrá que verse las caras contra uno de los rivales que más están sorprendiendo esta temporada, el Osasuna.
A pesar de que el Barça está en un momento espectacular en la competición doméstica, los azulgranas tiene varios motivos para preocuparse. El primero es la complicación de jugar en El Sadar. En la pasada temporada no pudieron pasar del empate 2-2 en un partido que, a pesar de tenerlo controlado, una mano de Piqué supuso un penalti para perder los tres puntos. Athur y Ansu Fati fueron los goleadores para el Barça y Roberto Torres puso los dos goles del Osasuna.
El segundo motivo es que el Real Madrid no fue capaz de ganarle esta temporada. El conjunto blanco llegaba al duelo en un momento de imbatibilidad absoluta pero Benzema falló un penalti que puso fin a la gran racha de los merengues. Y, la última razón, es el gran momento que está viviendo el Osasuna. El conjunto de Arrasate está en plena lucha por puestos europeos y la victoria contra el Celta les permite soñar con un reto que no se esperaban luchar en un primer momento.
A pesar de la dificultad del duelo, el Barcelona no debería perder a pesar de las complicaciones. Hasta ahora, sólo han pinchado dos veces a domicilio (empate en Vallecas y la derrota en el Bernabéu). Se trata de la última jornada antes del Mundial y la importancia de seguir apretando el liderato es clave en una temporada marcada por un parón de casi dos meses.