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El Atlético de Madrid está viviendo semanas muy duras en el que ha entrado en una espiral de malos resultados. El reciente empate contra un Espanyol con diez ha sido la última decepción de un equipo que no sale de la mala racha y tendrá su última cita antes del Mundial contra el Mallorca.
Tras la eliminación en toda competición europea, el equipo no ha levantado cabeza tampoco en liga. A pesar de que tanto el Cádiz como los pericos se trataban de duelos asequibles para sumar dos victorias, los colchoneros sólo han sumado un punto. Simeone no quiere otro tropiezo que complique más una plaza de Champions ya que equipos Real Betis y Osasuna le pisan los talones. Por ello, el partido en Mallorca se ha convertido en una victoria prácticamente obligada para evitar irse al parón con una imagen peor.
Sin embargo, los últimos registros entre ambos no se inclinan del lado de los de Diego Pablo Simeone. En la pasada temporada, los rojiblancos perdieron los dos duelos ligueros, tanto en la ida como en la vuelta. En concreto, el partido en Mallorca terminó 1-0 gracias a un gol de penalti del hombre de moda, Muriqi. El conjunto balear llega tras ganar a domicilio al Villarreal y buscará aprovechar la mala dinámica del rival para ir a por la sorpresa e intentar rascar puntos.
Además, también hay que contar con las ausencias de jugadores importantes como Joao Félix y José María Giménez por acumulación de tarjetas. Por lo tanto, se trata de un partido en el que el Atlético tendrá que salir enchufado desde el principio. Los continuos tropiezos que han tenido en las últimas semanas han creado un ambiente de pesimismo que buscarán eliminar con una victoria.