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La Selección de Brasil jugará este lunes su partido de octavos para seguir avanzando en el Mundial de Qatar y demostrar las razones por las que es la mayor favorita para ganar el campeonato. Frente a ellos tendrá la que posiblemente es la selección más sencilla que ha pasado a las primeras eliminatorias: Corea del Sur.
A pesar de que Brasil mostró un fútbol gris contra Camerún, no hay duda que los jugadores salieron con menos intensidad para evitar lesiones ya que tenían el pase matemáticamente. En esta ocasión, la 'canarinha' tendrá que verse las caras contra un rival inusual. Los coreanos apenas tienen experiencia en esta clase de desafíos ya que la última vez que pasaron de ronda fue en el Mundial de Sudáfrica de 2010 y nunca ha sido capaz de llegar más lejos.
Además, Brasil se trata de una selección con una plantilla infinitamente más competitiva, por lo que las posibilidades de que se de la sorpresa son muy remotas. Incluso, no es descartable que Brasil gana con bastante diferencia a su rival. Como mayor peligro de Corea del Sur está Son, el delantero del Tottenham que destaca por su velocidad y regate, siendo el único que sería capaz de incomodar a la defensa brasileña.
Como dato más relevante, tanto Vinicius como Rodrygo continúan sin haber marcado su primer gol en un Mundial, por lo que ambos tendrán la oportunidad de conseguirlo en unos octavos de final factibles para anotar. No hay duda de que no se puede dar ningún partido por ganado por muy favorito que sea un equipo. Corea viene de ganar a Portugal y empatar contra Uruguay, por lo que Brasil tendrá que salir sin despistes si no quiere que el partido se les ponga cuesta arriba.