El contenido disponible en esta sección está restringido para menores de 18 años.
Debe confirmar que tiene más de 18 años para acceder.
El Valencia tenía la necesidad de clasificarse para los cuartos de final de la Copa del Rey después de las dos derrotas consecutivas que habían cosechado y que les habían dolido bastante. Otra derrota más contra un equipo de Segunda División como el Sporting de Gijón no se contemplaba y la dirección de Gattuso para con su plantilla iba en un camino muy sencillo: cerrar el partido, a ser posible, en la primera mitad para evitar sustos posteriores.
La superioridad del Valencia se notó mucho en el terreno de juego, frente a un Sporting que no salió con la concentración que debían. Prueba de ello fue un despiste entre portero y defensa que estuvo cerca de traducirse en un gol de Cavani. No obstante, tan solo iba a tardar diez minutos en anotar el primer gol de la noche después de un rebote que le cayó al uruguayo.
Con un Sporting intentando volcarse arriba, el Valencia tuvo las cosas algo más sencillas y el segundo gol llegó tras un contraataque donde Kluivert se plantó delante del portero después de una carrera desde el centro del campo. Puso el balón por encima del portero y amplió aún más el marcador a 0-2. Pero los deseos de Gattuso se iban a cumplir, puesto que Cavani volvió a aparecer justo antes del descanso para poner el 0-3 que ponía al Valencia con pie y medio en los cuartos de final.
Solo faltaba que el Sporting de Gijón no despertara, algo que el Valencia evitó también en la segunda mitad. Samuel Lino puso el 0-4 definitivo que le dio al conjunto valenciano un cómodo pase hacia la siguiente fase. Ahora, ese mismo esfuerzo se requiere del equipo en liga, donde Europa va quedando un poco lejos y para poder seguir soñando deben empezar a sumar de tres en tres.