El Oviedo se pega un tiro en el pie

El Real Oviedo no pudo conseguir la victoria ante el colista, en un partido en el se puso 2-0 en los primeros minutos y en el que fue ganando 3-2 en los últimos. Los azules pagaron la relajación tras el resultado a favor y cuando quisieron reaccionar se quedaron sin tiempo. En medio de las pruebas y del debate del cambio de sistema, Anquela apostó por mantener el dibujo, pero cambió en la delantera, dando entrada a Ibra, después de los buenos minutos del senegalés en los últimos partidos.

El partido se puso pronto de cara, en el primer acercamiento del Real Oviedo a la portería del conjunto andaluz. Después de una arrancada de Saúl Berjón desde la izquierda, el balón le volvió a caer al asturiano, que sacó un centro al área pequeña que no acertó a despejar la defensa visitante, dejando el balón muerto en zona de gol, territorio del delantero. Ahí estaba Ibra para empujar, festejando bien pronto su titularidad.

El Oviedo mandaba en el partido y el Córdoba temblaba en defensa, con numerosas imprecisiones y dudas, algo que pronto volvió a aprovechar el conjunto carbayón. En el minuto ocho, después de una buena combinación, Ibra sirvió el balón a la carrera de Saúl Berjón, que atacó el balón de primeras desde la frontal y consiguió dirigirlo a la escuadra para poner el partido cuesta abajo antes del minuto diez.

El Córdoba se soltó tímidamente, rondando el área de Champagne, pero no conseguía generar ocasiones; algo que sí hacía el Oviedo. Nuevamente en un centro lateral desde la posición de Berjón, llegó un buen remate de cabeza de Ibra, que se marchó desviado por poco. Saúl estaba en modo asistente, y también buscó que Carlos Martínez anotara, pero el remate de volea del ex de la Real se marchó fuera.

La entrada de Piovaccari le dio mordiente al conjunto visitante, consiguiendo pisar en acciones concretas el área, y avisando en un par de ocasiones antes de anotar el gol que recortaba distancias. Después de una combinación en la frontal, sacó el disparo con pierna izquierda, al que no pudo llegar Champagne, colándose cerca del poste. El Córdoba despertó a la vez que el Oviedo se iba dejando contagiar, e incluso los visitantes tuvieron una ocasión para empatar antes del descanso. Piovaccari volvió a castigar la espalda de los defensas, y sacó el pase de la muerte hacia atrás, zona a la que llegó Andrés Martín para sacar un disparo centrado que consiguió rechazar con problemas Champagne.

Tras el paso por vestuarios, el guion se mantuvo con similitud a los minutos finales de la primera parte. Tras una falta, el balón colgado a punto estuvo de rematarlo hacia portería Chus Herrero en el segundo palo. El Oviedo avisó también en ataque, marcando territorio con un disparo de Ibra desde la frontal, rechazado por el portero visitante. Hubo una ligera modificación táctica, ya que Bárcenas se metió por dentro en el centro del campo y Saúl se situó cerca de Ibra en la delantera.

Ambos equipos seguían llegando con tímidas ocasiones. Dos disparos, uno de Álex Vallejo que se marchó desviado para el Córdoba y otro de Ibra que rechazó Marcos para el Oviedo fueron las siguientes ocasiones, en un partido en el que el reloj avanzaba despacio y el resultado pendía de un hilo. Se veía venir y el Córdoba acabó logrando el empate en una acción en la que Alfaro remató un centro en una segunda jugada después de un balón parado.

Al Oviedo le entraron entonces las prisas y un Anquela que no estaba nada contento con lo que estaba viendo, retiró a Folch para meter a Joselu y jugar con dos delanteros. La asociación entre Ibra y Joselu a punto estuvo de dar resultados cuando después de una acción del senegalés, un defensa visitante evitó que Joselu rematara. El Oviedo comenzó entonces a generar acciones de peligro, pero quedaba poco tiempo. El Córdoba, no obstante, tenía opciones claras a la contra. En el minuto 79, De Las Cuevas estuvo a punto de batir a Champagne con un disparo desde la frontal.

El Oviedo estaba volcado hacia la portería visitante e Ibra forzó una falta en la frontal. Joselu sorprendió asumiendo la responsabilidad, pero el resultado fue inmejorable. El andaluz la puso en la escuadra, y volvió a poner al Oviedo por delante, pero la alegría duró poco. El Córdoba reaccionó en el poco tiempo que le quedaba, y después de avisar en una acción que rechazó Champagne, Aguado remató de primeras un córner en el segundo palo para batir nuevamente la portería del portero argentino y poner el resultado final. Un resultado que no le vale al Oviedo, que se retiró con una sonora pitada del césped del coliseo azul.