El mismo castigo
El Real Oviedo cayó en El Toralín con dos goles en la segunda parte. El equipo de Javi Rozada fue superior durante más de 60 minutos y consiguió ponerse por delante en el marcador. Al igual que en partidos anteriores, dos errores puntuales condenaron a los carbayones, que se volvieron a Oviedo de vacío.
El cambio de entrenador se ha notado positivamente, a pesar de que no se traslade a los resultados. El nuevo míster apenas ha tenido tiempo para inculcar sus ideas, pero la actitud de los jugadores, y la forma de pelear los partidos es diferente.
En la mañana del domingo, Rozada volvió ha modificar su alineación para seguir probando esquemas y también por una cuestión física de los jugadores. Con tres partidos en siete días, es necesario dar descanso a los futbolistas para que estén al máximo, y eso es lo que hizo con Marco Sangalli. Destaca la titularidad de Borja Sánchez y de Lucas Ahijado. El primero de ellos había tenido minutos en los últimos encuentros, y sus buenas actuaciones le llevaron a la titularidad. Borja jugó 60 minutos y asistió a Ortuño en el gol.
Lucas disputó sus primeros minutos de la temporada en Ponferrada. El canterano salió en la alineación inicial y fue de menos a más. En la primera parte se dedicó a defender y apenas pisó área rival, pero en el segundo tiempo cambió. Lucas pudo sobreponerse a los nervios de su debut en el fútbol profesional y fue uno de los destacados del partido, sobre todo por su velocidad y desparpajo.
Joselu jugó en la primera parte escorado a la derecha y en la segunda jugó en punta con Ortuño. Tuvo una clara antes del gol tras un buen balón de Mossa, pero se estrelló en la madera. El Oviedo sigue colista con dos puntos y la semana que viene recibirá al Zaragoza, uno de los equipos invictos de la categoría.
