Acaba su cesión pero quiere seguir en el Real Oviedo: "No lo descarto, aquí he sido feliz"
A la espera de que se haga oficial el nombramiento de Rubén Reyes como sustituto de Francesc Arnau al frente de la dirección deportiva del Real Oviedo, al club se le acumula el trabajo en materia de fichajes en un mercado que no ha hecho más que arrancar. Uno de los nombres propios en clave azul es el de Gustavo Blanco Leschuk, que regresa al Antalyaspor después de finalizar su cesión en el Carlos Tartiere, y lo hace con el futuro en el aire.
En una entrevista con La Nueva España, el delantero argentino, máximo goleador del Real Oviedo en la recién terminada campaña con siete tantos, reconoce que en el aspecto individual "el curso fue bueno", aunque le queda la espinita de no haber podido ver más portería: "Es cierto que no hice bastantes goles, pero al menos sirvieron para ayudar al equipo", añade.
En la misma, Blanco Leschuk reconoce no tener nada claro qué pasará con su futuro: "Tengo que hablar de muchas cosas con mi agente sobre mi futuro. De momento, me quedan dos años de contrato en Turquía, pero la verdad que no sé si me voy a quedar ahí. Ahora quiero desconectar", recalca.
Pero también deja la puerta abierta a una posible vuelta al Real Oviedo: "No lo descarto, ¿por qué no? Aquí he sido feliz. Siempre y cuando mi familia esté dispuesta a seguir y decidamos que es lo mejor. Mi 'problema' es que no soy jugador libre", asegura el de Mendoza.
"Fue una experiencia nueva y muy positiva para mí. Jugué mucho y eso es lo que necesito para ser feliz. En Oviedo lo fui", reconoce Blanco Leschuk, que explica su despedida del 'Cuco' Ziganda: "Me agradeció le temporada y me dijo que era muy buen profesional. Yo le deseé lo mejor en el futuro".
