El derbi, blindado con más de 400 agentes de seguridad
La disputa del derbi asturiano entre el el Sporting de Gijón y el Real Oviedo en El Molinón, volverá a contar con un dispositivo especial de las fuerzas de seguridad del Estado. Con el objetivo de que el duelo sea una fiesta para los aficionados de ambos conjuntos y un ejemplo de deportividad, se repetirán las medidas del choque disputado en la primera vuelta en el Carlos Tartiere.
Más de 400 efectivos se encargarán de mantener el orden durante la jornada dominical. Con la intención de velar por el normal desarrollo de un encuentro que movilizará a agentes de la Policía Nacional en un número superior a 200, junto a miembros de la Policía Local, grupos de intervención y la Guardia Civil, que también pondrá su helicóptero al servicio del dispositivo. La premisa, evitar cualquier tipo de incidente que impida el normal desarrollo tanto del espectáculo deportivo como de los traslados de los aficionados hacia el mismo.
Los traslados
Un plan de seguridad que volverá a suponer una jornada maratoniana para los aficionados desplazados, en este caso los seguidores azules. Aquellos que vayan a estar presentes en el duelo en El Molinón tendrán que afrontar un largo día para apoyar a su equipo. Invertir un buen número de horas para ver un partido de fútbol, en un desplazamiento de apenas 30 kilómetros. La seguridad obliga. Los aficionados carbayones, con localidad para la cita en el terreno de juego rojiblanco, se desplazarán en autocares controlados y custodiados, en los horarios y condiciones ordenadas por Delegación del Gobierno.
Un recorrido que iniciarán este domingo a las 16.15 horas en el aparcamiento del Carlos Tartiere. Punto de encuentro donde se efectuarán los pertinentes registros y el reparto de las entradas. A las 18.00 horas, casi tres antes de que arranque el duelo, pondrán rumbo a Gijón. Tras la finalización del mismo tendrán que esperar una hora antes de poder abandonar las gradas. El regreso al punto de partida se estima que sea rondando la medianoche.
