Y es que perder en el Bilbao Arena frente al Nymburk (83-85) no entraba en ninguna quiniela previa. Un grave tropiezo que marca el devenir de los MIB en Europa y les obliga a abstraerse de viajes o cansancio para pensar únicamente en la victoria. La obtenida el domingo en Liga ante el CB Canarias sin duda ayudará tras romper la racha sufrida de tres derrotas consecutivas. También permitió ver a un gran Mamadou Samb, aunque se espera que Rakovic ya haya dejado atrás su gastroenteritis y sume minutos en la rotación interior. O que Kostas Vasileiadis y Lamont Hamilton se desenvuelvan a su nivel habitual.
Una vez conocido el sorteo de Copa y el emparejamiento con el Gran Canaria, la salida la verdad es que se las trae. Una nevada de impresión recibía a los vizcaínos a su llegada al país báltico donde les espera en el Arena Riga un VEF que apuesta decididamente por jugar sus compromisos a todo gas.
La semana pasada caía por un ajustado 86-82 en La Fonteta de Valencia firmando un espectacular 13/26 en triples. Su juego, por tanto, es muy abierto aunque el principal arma de los de Ramunas Butautas es el contraataque, lo que obligará a hacer un trabajo importante en el rebote y a espabilar en las transiciones defensivas.
De hecho el duelo de bases va a ser crucial a la hora de marcar el tiempo de juego. Si manda el yankee EJ Rowland los nuestros tendrán un serio problema. Además hay que apuntar en su plantilla al experto anotador Kristaps Janicenoks, y a sus dos gladiadores bajo los aros: Kaspars Berzins y Anatans Kavaliauskas.