Y es que a las dudas de Raúl López y Rakovic que causaron baja en la anterior jornada se han unido también Kostas Vasileiadis con un "hematoma en el cuadriceps" y Mamadou Samb con molestias en un tobillo.
Karsikaris explicaba la realidad de su equipo durante la semana ya que "con ocho jugadores no puedes entrenar igual y eso es un problema. No estamos en el mejor momento y cualquier despiste o dificultad que podamos encontrar, nos cuesta. Sólo tenemos que cambiar la dinámica, pero la realidad es que el equipo no está como yo quisiera de frescura".
A los problemas físicos se le une también el cansancio mental de una temporada larga y los recuerdos de la final de la Eurocup perdida. En este sentido el preparador griego no escondía que "somos humanos y tenemos sentimientos" y que, por ello, aún tiene "cosas en la cabeza".
Eso sí, también pide a sus jugadores "acabar lo mejor posible para los 'play off' y por eso si ganamos el domingo el equipo se liberará de presión y afrontara los siguientes partidos con otra dinámica", explicaba.
Lo primero es hacer frente a un "rival directo" por alcanzar la cuarta plaza, el CAI Zaragoza, un equipo "duro, muy sólido y con un juego muy equilibrado" que tiene el aliciente añadido de poder "volver a los 'play offs' después de muchos años".
Katsikaris también destacaba del conjunto maño que "no pierde balones y está muy bien equilibrado. No hay una 'megaestrella' cualquier y jugador tiene capacidad para anotar. Me gusta este equipo, castigan muy bien las debilidades del rival y a nosotros intentaran hacerlo debajo del aro", concluía.
Será después de casi un mes sin jugar en el Bilbao Arena con el aliento de una afición a la que Katsikaris ha pedido "paciencia" y apoyo para el equipo en los momentos en los que vamos a sufrir".