Según informa hoy La Opinión de Málaga, Manolo Rubia se encuentra en San Francisco negociando con la franquicia californiana las condiciones del hipotético traspaso. La claúsula del pívot está fijada en un millón de euros.
Todavía le quedan tres años de contrato, si bien nunca ha vestido la camiseta del primer equipo. Según confirma el rotativo, el gigante bosnio trabajará el próximo verano con los Warriors, que entonces decidirán si el desembolso económico es interesante para ellos.