Siendo sinceros, el conjunto de Rafa Pueyo, que hoy viernes asumía el mando de los hombres de negro, buscaba sobre todo testarse ante uno de los mejores clubes del continente para ver como anda el nivel de forma; y en fin... las lecturas no es que puedan ser muy positivas salvo en jugadores puntuales como Mumbrú, Gabriel o el interesante Kavaliauskas.
Pero dentro del escozor de cualquier derrota, más aún una soberana paliza, seguro que la plantilla agradecerá poder descansar el sábado cara a la gran cita del domingo ante los Philadelphia 76ers en el Bizkaia Arena (18.00h). El caramelo ha durado muy poco. Tras un gran inicio liderado por Alex Mumbrú los vizcaínos se han encontrado con un alud de triples, lo que unido a sus castigadas pérdidas de balón le han llevado a estar 18 puntos abajo tras un segundo cuarto para olvidar (11-28). Lejos de menguar la diferencia subía a -41 en la segunda mitad cuando ya los blancos se divertían en un improvisado concurso de triples. Al final los de Laso han firmado una tarjeta de 19/35, a uno del récord de esta competición. Y menos mal que hubo un acierto casi pleno de los nuestros en los tiros libres porque si no la somanta pudo ser como para darse al kalimotxo. Al mismísimo Fotis Katsikaris se le veía sufrir en la grada como se observa en las fotos de ElDesmarque.
Un bajón para la marea negra pero parece lógico pensar que una vez vista venir la derrota los bilbaínos se han puesto a pensar en la cita con los de Pennsylvania y se han dejado ir ante uno de los colosos de Europa. En vez de minutos ha habido dos cuartos de la basura enteritos.