El Unicaja perfila su plantilla. Tiene cerrado ya el puesto de base y prácticamente también los escoltas y aleros. Pero el juego interior ha quedado muy tocado. De momento, el único que va a seguir es Fran Vázquez.
El pívot gallego firmará por dos campañas con opción a otra más. Lo tiene listo. El gran problema ha sido la espantada de Stimac, que pilló por sorpresa a todo el mundo. El serbio asegura que lo que quería era un contrato mejor. Pero a Plaza le ha decepcionado muchísimo y parece difícil que vaya a haber algún tipo de tregua.
Luego está el caso de Hettsheimeir. Podía seguir si el club quería, pero se decidió buscar otro hombre más fiable. Se puede decir que la irregularidad (sobre todo por las lesiones) le ha condenado. Y la otra bomba fue ver cómo Caner-Medley se marchaba al baloncesto kazajo firmando por el BC Astana. No estaba muy claro que fuese a seguir, de hecho el club trabajaba ya en otras opciones, pero resultó sorprendente su decisión.
El juego interior lo cerraba Domas Sabonis, comodín de la casa. El hijo del mito lituano decidió que su formación tenía que seguir en Estados Unidos. Así que nada pudo hacer Plaza para retener al muchacho, formado en Los Guindos. Maodo Nguirane será el nuevo 'Domas'.
¿Y en qué situación está ahora el Unicaja? Pues que tiene que firmar dos 'cuatros' y un 'cinco'. No es poca cosa. El deseo de Plaza es que el ala-pívot, digamos, potente sea Dusko Savanovic. Pero es francamente complicado por cuestiones económicas. Luego ha surgido un carrusel de nombres: Green, Hunter, Hummel... A ver en qué queda todo. Y además, encontrar un cinco que sea capaz de hacer de Stimac.