Nada más acabar el segundo partido de la eliminatoria, la sensación es que el Barcelona es el equipo que jugará sin demasiadas dudas la final, pero se emanan señales de respeto desde Can Barça hacia el Unicaja. Empezando por la máxima cabeza técnica.
"El tercer partido será un partido muy duro donde ellos tendrán alternativas diferentes de juego, se siente cómodos en Málaga, donde en la fase regular sólo ha ganado el CAI Zaragoza y nosotros, y tendrán el apoyo incondicional de una gran afición. Vamos a tener que hacer un gran partido si queremos ganar el tercer asalto", mentalizaba Pascual a sus jugadores, advirtiendo del ambiente que se registrará en el coliseo malagueño.