La activación de una alarma en el Berlín Arena, 65 minutos antes del inicio del partido entre Serbia e Italia, motivó su desalojo inmediato, aunque apenas diez minutos después todo volvió a la normalidad.Aunque todavía no se había abierto la entrada a los aficionados, dentro del recinto deportivo estaban ya todos los servicios de seguridad, técnicos y muchos periodistas.
Por megafonía se anunció que "por motivos técnicos y por la propia seguridad de los presentes" había que desalojar el recinto.
La llegada de los bomberos y la constatación de que una alarma había saltado de forma accidental devolvió la normalidad al Berlín Arena, que reabrió las puertas diez minutos después de que fuese desalojado.