Un chaparrón de puntos en el tercer cuarto bastó al Unicaja para sentenciar al Sassari y ganar (80-62) un encuentro que hasta el descanso se le puso cuesta arriba. Mención especial para Hendrix (19 puntos, 7 rebotes, 21 de valoración). Aunque sin ofrecer sensaciones brillantes, los de Joan Plaza se ponen 4-0 y firman un inmaculado inicio en Euroliga.
Cuando Jackson percutía desde el triple (12-5, minuto 6) y se pedía tiempo muerto, el partido tenía pinta de ser otro día más en la oficina para el Unicaja. Nada más lejos: el conjunto italiano respondía con un 2-13 y ponía el encuentro patas arriba (22-26). Plaza, buscando soluciones, quitó a Kuzminskas y la sangría se hizo aún más fuerte (26-33, minuto 27). Haynes era un dolor de cabeza al tiempo que Logan y Petway se enchufaban.
Entre faltita y faltita, y el buen hacer de Hendrix, el Unicaja se reenganchó. También un triple de Dani Díez (31-33). Los malagueños volvían a cogerle el pulso a un choque ante un Sassari al que en ningún momento pareció pesarle su 0-3 en su casillero de Euroliga.
Tras el descanso, la tromba. El Unicaja, entre el final del segundo y transcurridos 8:17 minutos del tercer cuarto, le endosó un parcial de 24 puntos al bloque transalpino. La defensa cajista provocó la desconexión del Sassari, que rompió su racha desde el tiro libre. El Unicaja entró en la verdad con una renta suficiente (60-44). Se dedicó a divertirse y el Sassari a mirar. 4-0 y a poner las miras en la ACB.