El ICL Manresa visita mañana la pista del Unicaja de Málaga con los deberes hechos pero con el reto de conseguir ganar a una equipo de competición europea.Los de Ibon Navarro llegan al Martín Carpena en una situación inimaginable para la mayoría a principio de temporada. Los del Bages son octavos con una balance de 6 victorias y 6 derrotas, que los sitúan en octava posición.
Y poder echar cálculos para la Copa en un equipo cuyo objetivo exclusivo es la permanencia es todo un éxito. Aún así, el entrenador del ICL, Ibon Navarro, no quiere darle importancia a la posibilidad de meterse en la Copa y recuerda que el objetivo es la permanencia y que puede que estas 6 victorias sean la mitad de las 12 que se suelen marcar como salvadoras.
Navarro recuerda también lo circunstancial de la clasificación, siempre en función de cómo caiga el calendario de partidos. Prefiere ir día a día y explica que por ahora lo único importante es ser competitivos en Málaga ya que la experiencia "nos dice que no somos capaces de llegar con opciones a los finales de partido con un equipo de Euroliga. Vamos a ver si podemos hacerlo".
Y si impensable era la trayectoria del ICL, más lo era pensar que Málaga y Manresa se enfrentarían, con los catalanes por encima de los andaluces en la clasificación. Y es que los de Joan Plaza no pasan por su mejor momento después de encadenar tres derrotas que los han bajado a la novena plaza, justo después del Manresa, con 5 victorias y 7 derrotas.
Para el partido de mañana, Manresa tendrá la baja ya conocida del base Jermaine Thomas, con problemas en la espalda. Su baja, junto al mayor conocimiento que tienen ya los rivales del que ha sido el hombre clave para el buen arranque del Manresa, Dejan Musli, han dado paso al segundo batallón del Manresa. Los hombres de menos minutos que, sobretodo en el último partido contra el CAI en casa, han demostrado su capacidad para mantener el ritmo y el nivel y garantizar a Navarro una rotación de garantías.
En Málaga tendrán otra oportunidad de demostrarlo e intentar conseguir una victoria en una pista muy complicada, donde los catalanes solo han ganado en dos de sus 12 últimas visitas. Los catalanes ganaron por última vez en el Martín Carpena en abril de 2012.