El entrenador del Rio Natura Monbus Obradoiro, Moncho Fernández, ha asegurado hoy que el entrenador del CAI Zaragoza, Andreu Casadevall, aprovecha "las virtudes de sus jugadores" con su estilo de juego implantado tras su llegada al banquillo en noviembre.El conjunto compostelano se mide al equipo maño este domingo a partir de las 12.15 horas, un partido al que llegan "todos bien" en el Obradoiro, según ha explicado Fernández a los medios de comunicación.
"Muy contentos no estamos, lógicamente", ha declarado y ha dicho que "el partido pasado -frente al Montakit Fuenlabrada- es agua pasada, está totalmente olvidado".
Con diez jornadas por delante, "todos los partidos tienen una gran importancia porque ya se acerca el último tercio de liga" en un momento en que "todo el mundo busca posicionarse para conseguir sus objetivos" y por eso el técnico cree que la visita a Zaragoza "no va a ser esto ni más ni menos que los que nos quedan".
Preguntado por el mal momento del CAI, que está en la lucha por la permanencia cuando estaba acostumbrado a disputar la fase final por el título, Fernández ha opinado que eso "es buena muestra de lo dura que es la liga".
El rival "juega con el estilo de Andreu (Casadevall)", que es "un entrenador con estilo propio que ha impuesto su sello y su forma de ver el baloncesto" con el que aprovecha "las virtudes de sus jugadores lo mejor que puede" y combina "varios tipos de defensa".
Esta semana se ha conocido el interés de otros clubes por el base Donnie McGrath, aunque no ha llegado ninguna oferta y el jugador, como "gran profesional", "ha entrenado con absoluta normalidad".
En las últimas jornadas ha bajado el nivel de acierto de Adam Waczynski, la referencia en ataque el equipo, algo que no preocupa en exceso al técnico, pues afirma que en el baloncesto hay muchos errores, como demuestran los porcentajes de los mejores anotadores de la Liga Endesa, y aplaude que el jugador no "deje de tirar".
El argumento de que "el error forma parte del juego" lo utiliza Fernández cuando se le pregunta por el arbitraje, pues "los árbitros aciertan y se equivocan".