El ala-pívot argentino del Real Madrid Andrés Nocioni vivió este domingo uno de los partidos más especiales de su trayectoria deportiva al cerrar una semana en la que comunicó oficialmente su retirada del baloncesto y se enfrentó al Baskonia, club en el que desarrolló gran parte de su carrera.Andrés Nocioni aterrizó en el Baskonia en la temporada 1999/2000, para jugar la siguiente campaña cedido en Manresa en la LEB Oro. Posteriormente volvió al Baskonia para jugar tres temporadas completas (2001-2004), convirtiéndose en una de las grandes estrellas del equipo vasco junto a su compatriota Luis Scola, del que le separan nueve partidos para igualarlo a 317 en la Liga Endesa.
Tras una larga trayectoria en la NBA (Chicago Bulls, Philadelphia 76ers y Sacramento Kings), regresó a Vitoria en la temporada 2011/12 para jugar tres temporadas más en el equipo alavés, antes de fichar por el Real Madrid, con el que este año cumple su tercera temporada.
Con el conjunto blanco ha ganado dos Ligas, tres Copas del Rey, una Supercopa de España, una Intercontinental y una Euroliga en 2015, en la que fue elegido MVP de la final.
A sus 37 años, Nocioni ya ha puesto fecha al fin de su trayectoria deportiva. "Hacía tiempo que notaba que tenía que parar y me siento muy bien conmigo mismo después de haber tomado la decisión. He jugado como he vivido, con pasión, y ahora hay otras cosas que tengo que priorizar, como la familia", dijo al anunciar su retirada esta semana.
En su primer partido tras anunciar el adiós, Nocioni se enfrentó al Baskonia y recibió en varias ocasiones los aplausos de su afición. Primero al sonar su nombre por megafonía, después al entrar por primera vez a la cancha en el minuto cinco del segundo cuarto y también por un tapón que frenó una canasta de Kim Tillie antes del descanso.
En total, Nocioni estuvo sobre la pista poco más de seis minutos, anotó dos puntos, cogió un rebote y tuvo un dos de valoración.
Su técnico, Pablo Laso, lo utilizó en el segundo cuarto y casi al final lo reclutó para el último minuto de partido, en el que se decidió todo sobre la pista y su equipo, que perdía a falta de cuarenta segundos, terminó ganando de cuatro.