El técnico de Unicaja, Joan Plaza, valoró la actitud de su equipo tras vencer por 91 a 75 al ICL Manresa, que certificó en el Carpena su descenso matemático. El entrenador se mostró "parcialmente satisfecho" por el trabajo realizado, aunque aseguró que "podía haber sido todo mejor".
Plaza insistió en la rueda de prensa posterior al partido que el partido era "complicado" para el Unicaja debido a que llevan tres meses "de ritmo altísimo, exigencia muy dura y sin temporizar en ningún partido". El entrenador catalán apuntó que enfrentarse al Manresa suponía verse las caras "con grandes jugadores, que venían aquí sin nada que perder" y añadió que el "poco tiempo desde el partido del Barcelona" era otro factor negativo.
El entrenador sí se mostró "contento por los minutos que están recibiendo otros jugadores" y por las 28 asistencias realizadas en el encuentro. Aunque matizó que el conjunto cajista estuvo "muy mal en el rebote defensivo".
"Dentro de esa exigencia, estoy parcialmente satisfecho y vamos a ver cómo nos reponemos de cara al tramo final para los playoff", declaró el técnico cajista.
Cuestionado por Alberto Díaz y el respeto, o no, que le tienen los árbitros dentro de la pista, Plaza quiso relajar el asunto y afirmó que el jugador "se irá ganando el respeto de los árbitros; Alberto tiene muchas condiciones, es cierto que puede desquiciar, pero acabará teniendo respeto".
Otra de las cuestiones que salió a relucir durante la comparecencia del entrenador del Unicaja fue el número de equipos que compiten en la ACB. Sobre este tema, Plaza subrayó la necesidad de una "figura que aúne los criterios de esas organizaciones porque el próximo año con todas esas opciones y con 18 equipos faltan fechas. Es un planteamiento general donde todos deben encontrar un límite" y zanjó el tema asegurando que "merecerse algo deportivamente está bien, pero también hay que reunir una serie de requisitos".
Cuestionado por la lesión en el gemelo de Carlos Suárez, que se produjo en el último cuarto en un choque con Romaric, Joan Plaza dijo que, tras los estudios hechos, "se ve un poco de líquido; esperemos que no sea nada".