El Boquerón Báltico del Unicaja Baloncesto se marchó hace dos años, pero sigue teniendo Málaga muy presente. Mindaugas Kuzminskas manda guiños con frecuencia a través de las redes y estos días ha visitado la Costa del Sol, de la que guarda un gratísimo recuerdo.
"Estuve esperando este momento durante dos años. Volver a Málaga y encontrar a este gente especial del Unicaja a la que eché tanto de menos", decía el jugador lituano a través de las redes en una fotografía acompañado de miembros del club.
Kuzminskas compartió mesa y mantel con Manolo Rubia y su hija Laurita; el entrenador ayudante, Ángel Cañete; los responsables de prensa, Ignacio Almarcha y Rosa Mariscal; el delegado, Javi Salvo; y la fisioterapeuta María López.
La próxima temporada, Kuzminskas continuará en Milán, donde también le acompañarán Nedovic, con el que coincidió un año en Málaga, y Brooks, otros ex cajistas.