Luis Casimiro estaba contento en la sala de prensa del Carpena. Su Unicaja es capaz de ganar en registros diferentes, como exigió con su dureza un UCAM Murcia que lleva la exigencia física hasta el extremo.
"Destacaría cómo el equipo ha sabido leer el nivel físico que demandaba el partido, hemos ganado el partido en los últimos 15 minutos. Hemos leído cómo había que ganarlo", afirmaba Casimiro, que destacaba lo que hizo su equipo para vencer: "En ese momento estuvimos muy bien en defensa y duros en el rebote, con porcentajes muy buenos, algo de rebote de ataque quizá nos faltó. 116 de valoración y 19 asistencias en un partido sin hueco para pases liberados son grandes cifras. Tuvimos una buenísima mentalidad para leer el partido. Hemos ganado desde diferentes estilos de juego y eso hay que valorárselo a los jugadores".
"Va en el estilo de juego, cada equipo utiliza un estilo", razonó Casimiro tras la queja del entrenador rival por la diferencia amplia en los tiros libres (34-5 para el Unicaja: "Somos el equipo que menos faltas hace para que la gente no vaya al bonus, es algo que tenemos hablado. Baskonia juega así también y es su estilo. Es fácil de analizar y demostrar por qué tiramos más tiros libres que ellos. Me gustaría que fuera siempre así, que estuviéramos tan acertados (32/34). Estamos en el 80% en el general. Estamos en una buena línea ahí".
"Hemos cambiado la defensa del pick and roll en ese momento", explicó Casimiro sobre el momento crítico en el que el UCAM se puso por delante en el tercer cuarto: "Han tenido mucho acierto, hay que decirlo y reconocer que movieron la bola muy bien. Con el cambio había menos tiros abiertos y hemos defendido mejor. Ellos metieron 48% en tiros de tres, que es mucho para un equipo que mete menos. Entonces han bajado la diferencia con acierto. Sin que estemos especialmente preparados para esa dureza física, competimos bien. Lo de dureza que no se entienda como despectivo. Me refiero a intenso, a dureza en los contactos. Era un partido difícil hacer un baloncesto bonito y romper antes. Ganar partidos cuesta".
"Los compañeros quieren a Dani, tiene el equipo una química espectacular", refirió, por último el técnico, cuando se le preguntó por la gran reacción del banquillo a grandes acciones del alero: "Nos queremos tanto que, de vez en cuando, tenemos los roces, pero nos lo perdonamos al segundo. El equipo está con Dani y con todos. Si a alguien no le sale algo del todo bien, pues estamos más aún con él, como ha demostrado el equipo con Dani".